Pérdida auditiva

Uno de los principales temores de llegar a la vejez es la pérdida de la audición, la sordera es una de las condiciones más comunes que afectan a los adultos mayores. Según las estadísticas una de cada tres personas mayores de 60 años sufre la pérdida de audición.

Esto resulta ser frustrante para la persona, ya que complica por completo su modo de vida, cosas como disfrutar de una simple conversación se hacen difíciles y esto genera constantes cambios de humor.

¿Cómo saber cuándo hay problemas de audición?

Si usted duda de su capacidad para escuchar o la de algún miembro de la familia, la respuesta a las siguientes preguntas podría ayudarlo a determinar y si está perdiendo facultades auditivas.

•¿Tiene problemas para hablar por teléfono?

•¿Le cuesta escuchar una conversación donde hay más de dos personas hablando?

•¿Se esfuerza mucho para entender una conversación?

•¿Siente que las personas con las que habla murmuran?

•¿Le pide a las personas que repitan lo que dicen?

•¿Escucha el televisor al máximo volumen?

Si la mayoría de las respuestas son positivas, el paso que debe tomar de inmediato es buscar ayuda médica, así un especialista lo evaluará y le brindará las opciones de tratamiento más adecuadas.

¿Qué ocasiona la pérdida de la audición?

Existen muchas causas que pueden originar esta dificultad, el ámbito laboral es una de ellas, muchos trabajadores de la construcción, músicos, personal de los aeropuertos y militares sufren de sordera debido a la excesiva exposición a ruidos muy fuertes.

Hay otros casos en que las personas pierden lenta y progresivamente la audición con el paso de los años. Esta condición es conocida como presbiacusia y los doctores aún no han determinado por qué sucede, pero lo asocian a un componente hereditario.

¿Cómo puede ayudar la familia?

La familia puede ayudar al paciente de muchas formas, estas son algunas cosas que se pueden hacer:

•Hable con sus familiares y amigos del problema, cuénteles que escuchar es algo difícil para usted.

•Hablarle de frente a la persona afectada, así podrá guiarse además de sus palabras por las expresiones y gestos.

•Hable más de cerca con las personas y pídales que hablen un poco más fuerte.

•Aléjese lo de los ruidos cuando sea posible, ya que estos dificultan su capacidad para seguir una conversación.

Uso de audífonos

Este instrumento diminuto se coloca dentro o detrás de la oreja y permite amplificar los sonidos, haciendo que se escuchen más fuertes de lo normal. Hay pacientes que se sienten un poco incómodos por el uso de estos pero es cuestión de adaptación y costumbre.

Para encontrar el audífono adecuado para ti, debes probar más de uno con la ayuda de tu médico o audiólogo y probar con ellos durante un tiempo hasta que encuentre el apropiado.