Empresa rechaza el informe de Oxfam que la vincula con el asesinato de Berta Cáceres

Un activista de derechos humanos sostiene una foto de la dirigente indígena lenca Berta Cáceres frente al Ministerio Público de Honduras, el pasado jueves 3 de marzo de 2016, en Tegucigalpa.
Un activista de derechos humanos sostiene una foto de la dirigente indígena lenca Berta Cáceres frente al Ministerio Público de Honduras, el pasado jueves 3 de marzo de 2016, en Tegucigalpa. / EFE
Efe
30 de marzo 2017 - 16:29

La Empresa Desarrollos Energéticos Sociedad Anónima (DESA) rechazó hoy un estudio de la organización Oxfam que la vincula con el asesinato de la ambientalista hondureña Berta Cáceres, el 3 de marzo de 2016.

La empresa DESA desarrollaba el proyecto hidroeléctrico Agua Zarca en el occidente de Honduras, al que Cáceres se oponía por considerar que causaba daño al ambiente y comunidades indígenas.

"Agua Zarca y DESA rechazan enérgicamente todos los comentarios infundados que buscan perjudicar un proyecto de inversión social a partir de motivaciones políticas", dijo la empresa en un comunicado.

Añadió que "como se ha establecido en diversas ocasiones, Agua Zarca y DESA están completamente desvinculados a los desafortunados hechos que terminaron con la vida de la señora Berta Cáceres y niegan cualquier vinculación con cualquier acto de violencia o intimidación en contra de cualquier persona".

"Agua Zarca y DESA actúan siempre respetando la legalidad y las instituciones, apegados a lo que establece la ley", sostuvo la fuente, en alusión al señalamiento del estudio de Oxfam que indica que la empresa habría recibido la ampliación de su licencia ambiental sin autorización del Parlamento hondureño.

"En relación a las modificaciones que se efectuaron en el Contrato de Operación y la Contrata de Aguas, la Ley de Contratación del Estado establece que las modificaciones a los contratos que han sido aprobados por el Congreso Nacional (Parlamento) no requerirán ser aprobados nuevamente", ahondó DESA.

La empresa también rechazó que haya violentado el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre pueblos indígenas, como señala el estudio de Oxfam, en el que la madre de la ambientalista asesinada, Austra Berta Flores, señala que "en su momento" DESA "persiguió y acusó criminalmente" a su hija.

La empresa DESA "cumplió con lo establecido en la normativa nacional vigente en relación a la participación de las comunidades del área de influencia del proyecto. Aquí se ha aplicado la Ley de Municipalidades utilizando la figura legal del 'Cabildo Abierto', el cual constituye un instrumento de comunicación que responde de forma directa a los anhelos de la población", agrega el comunicado.

DESA considera que ir en contra de un proyecto de inversión, como el de Agua Zarca, es estar en contra del empleo y la prosperidad de las comunidades que más lo necesitan.

"Sin embargo, Agua Zarca y DESA no descansarán hasta cumplir su promesa de generar empleos y una oportunidad para salir adelante para cientos de familias de las comunidades de influencia del proyecto", en el occidente del país, enfatizó la empresa.

Aseguró que ha generado más de 1.500 empleos directos e indirectos, que 1.900 familias se han beneficiado con electrificación, otras 1.400 tienen acceso a carreteras dignas y 350 a agua potable como parte de sus programas de inversión social.

Según DESA, el proyecto Agua Zarca, que está paralizado desde el asesinato de Berta Cáceres, es de energía limpia, ecológica y renovable que busca generar fuentes de empleo que ayuden a diversas comunidades de Santa Bárbara e Intibucá a salir de la pobreza y alcanzar el desarrollo.

El Consejo Hondureño de la Empresa Privada Hondureña (COHEP) también rechazó en un comunicado "todas las iniciativas políticas nacionales y de organizaciones político-internacionales que buscan detener proyectos que representan una oportunidad de empleo y desarrollo para todos los hondureños".

Sobre el informe de Oxfam, presentado el martes en Tegucigalpa, el COHEP expresó su "profunda preocupación por las declaraciones que confunden a la población y que contribuyen a esconder la verdad".

Por el asesinato de Berta Cáceres han sido detenidas ocho personas, pero sus familiares y diversas organizaciones, que no confían en el proceso de investigación, exigen que se capture y condene a los autores intelectuales del crimen.

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