Piden a la oposición de Nicaragua unirse en un tema común

Si la oposición de Nicaragua quiere tener éxito frente al Gobierno de Daniel Ortega, debe unirse alrededor de un tema común, afirmó hoy el exministro de Educación Humberto Belli (1990-1998).

"Un aspecto importante es la unidad de la oposición (...) deben hacer un tema común al menos en el tema de la elección, porque sin elecciones no podemos tener democracia en Nicaragua, y ese debe ser un factor aglutinante", dijo a Efe Belli, ministro del Gobierno de Violeta Barrios (1990-1997).

Actualmente las ideologías políticas de Nicaragua están divididas entre quienes apoyan a Ortega y sus detractores, pero estos últimos están dispersos.

Para Belli, sociólogo y analista político, unirse es un primer paso, pues los disidentes además necesitan "movilizar a la oposición para que este sea un movimiento democrático de masas".

Simultáneamente, deben "mantener informada a la opinión internacional sobre todas las violaciones legales y de derechos humanos que pasan en el país", sostuvo el experto, quien fue además ministro de la Familia (1998-2000).

El exfuncionario agregó a la lista de requisitos el "coraje" para enfrentar al Gobierno.

"No hay en Nicaragua presos políticos, no es porque Ortega sea bondadoso, no porque no sea represivo, sino porque no le hemos dado la oportunidad de que haya presos políticos, porque hemos sido demasiado bien portados", insistió.

Belli dio sus recomendaciones durante una reunión de grupos opositores, cuando faltan nueve días para las elecciones generales de Nicaragua, en las que Ortega aspira a su tercer período consecutivo.

Unos 4,34 millones de nicaragüenses están habilitados para elegir el 6 de noviembre próximo a un presidente, un vicepresidente, 90 diputados ante la Asamblea Nacional y 20 representantes ante el Parlamento Centroamericano.

Los comicios en Nicaragua se celebrarán sin observación electoral, con el presidente Daniel Ortega como favorito, esta vez con su esposa, Rosario Murillo, como aspirante a la vicepresidencia.

Además, los poderes Judicial, Electoral y Legislativo han anulado al principal grupo opositor y han despejado el camino a Ortega, líder del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), ya que el resto de partidos que compiten son minoritarios.