Lanchas patrulleras de Italia, un regalo caro

Contrario a lo que siempre dijo el expresidente Ricardo Martinelli, el valor de las lanchas donadas por Italia no es de 300 millones de dólares como se señaló en el 2012. Documentos obtenidos por TVN-2.com revelan que el costo de las seis embarcaciones no llega ni a los 23 millones de dólares.

Eso no es lo único llamativo de la transacción sino que el gobierno panameño tuvo que reconocer a la empresa Finmeccanica 10 millones de euros por la reparación de las embarcaciones.

Inicialmente la compañía asumió ese costo pero cuando surgió el pleito con Panamá por el contrato para la compra de radares y helicópteros, Finmeccanica le cobró al Gobierno panameño lo que había gastado reparando las embarcaciones que habían sido donadas.

En mayo del 2012 durante la ceremonia de bautizo de las cuatro lanchas patrulleras que estaban en Panamá, Martinelli dijo: “Panamá ahora si va a poder ser combatiente contra la droga y el narcotráfico, siempre y cuando seamos consecuentes para darle mantenimiento a este equipo”. Lo que no se sabía en ese momento es que Finmeccanica asumió la reparación de las naves, dinero que años más tarde le reclamó a Panamá.

Ministros lo sabían todo

La pregunta que surge es ¿Sabía Panamá que las lanchas patrulleras donadas por Italia no estaban en buen estado y que tendrían que repararlas?.

Según los documentos obtenidos por la respuesta, es sí.

En esta carta dirigida a Martinelli, Alejandro Garuz exviceministro de Seguridad le informa que tras haber sostenido una reunión el 21 de febrero del 2013 con el embajador de Panamá en Italia Guido Martinelli y el Almirante Pierluigi Cacioppo en Roma, a Italia le quedaron múltiples inquietudes.

Señaló que las lanchas de clase 900 que faltaban por entregar a Panamá, no estaban en condiciones de navegabilidad, indicó que la Guardia Costera Italiana no tenía previsto ninguna adecuación de la embarcación CP 902 valorada en 7.3 millones de euros y la CP 903 cuyo costo era de 7.2 millones de euros.

En el acta de cesión a título gratuito emitida por el Ministerio de las Infraestructuras y del Transporte de Italia en el 2012 se establece que las dos unidades navales clase 900 fueron aceptadas por el Gobierno de Panamá en el estado de hecho y de derecho en que se encontraban.

En otra nota Garuz le dice al Comandante general de la Guardia Costera Italiana, Marco Brusco, le ratifique la remoción de los equipos que se encontraban en las patrulleras de clase 200. Indicó que para él fue una sorpresa porque contrario a lo contemplado en el Memorandum de Entendimiento, el Capitán de Fragata Sergio Lo Presti le informó que sólo recibirían el casco de las naves.

Al final a Panamá llegaron cinco de las seis embarcaciones, una de clase 900 se quedó desmantelada en Italia, trascendió que sus piezas fueron utilizadas para reparar las otras embarcaciones.

En síntesis Panamá perdió 10 millones de euros por la reparación de unas embarcaciones que no han podido ser utilizadas para el objetivo que fue declarado por las autoridades de ese momento.

De las cinco patrulleras que están en Panamá solo dos están operativas, además no se prestan para perseguir las lanchas rápidas que utilizan los narcotraficantes.

Del crédito que ahora Finmeccanica le está dando a Panamá tras el nuevo acuerdo, ya fueron restados esos 10 millones de euros que costó la reparación de las patrulleras.