Gestores de ahorros privados de pensiones registran merma del 25 al 30% por efectos del COVID-19

Los efectos de la crisis desatada por la pandemia del COVID-19, está reflejando sus primeros efectos en el sector de pensiones privadas en Panamá.

Según el economista, Samuel Moreno, los ingresos que perciben estas empresas gestoras de fondos de pensiones en el país se han visto mermados entre un 25 a 30%.

Y es que, en Panamá, en dos meses que van de cuarentena, se han suspendido más 110 mil contratos laborales, por lo que muchas personas que tienen estos sistemas de ahorros no pueden hacer frente a los pagos de estas pensiones, explicó.

Frente a este panorama, Moreno aclaró que los afiliados a las pensiones privadas no perderán el valor nominal en sus fondos de pensiones, sino que verán una reducción en la tasa de interés de sus fondos.

“Los fondos no van a dar los rendimientos que se estaban esperando, y en el flujo acumulado por año se va a percibir menos plata de la que se había estipulado en el contrato con la gestora de ahorros del fondo de pensiones”, detalló.

Es decir, que, si un ahorrista mantiene un contrato con una de estos agentes económicos, cuyo descuento es de $113 por mes, garantizando una tasa de 3.5%, está podría reducirse a 2% o hasta 1%.

En estos casos, pronosticó Moreno, las personas se pudiesen inclinar a buscar alternativas para un mayor rendimiento de su dinero, como ponerlo en plazo fijo en un banco o buscar en el mercado cuáles de los sistemas de pensiones están ofreciendo mejores tasas.

Por lo general estos agentes económicos de ahorros para pensiones invierten los activos de sus clientes en bancos, pero, en la actualidad, con la rebaja de las tasas de intereses por la crisis global, los rendimientos se pudiesen estar viendo afectados.

Posición de la FIAP

El pasado, 27 de marzo, la Federación Internacional de Administradoras de Fondos de Pensiones (FIAP), reconoció que la pandemia de coronavirus que azota con una fuerza sin precedentes al mundo, tiene profundos efectos en el valor de los activos y nada, ni nadie está ajeno a los efectos negativos de esta crisis, y ciertamente, los fondos de pensiones tampoco, los que han bajado bruscamente su valor.

La comunicación oficial subrayó que esto obedece a que, desde el 22 de enero al 24 de marzo de 2020, el valor promedio de las acciones de los EE.UU. (Dow Jones) se redujo en un 29%, las de Europa (EURO S 600) en un 28%, las de Japón (NIKKEI) en un 25%, las de China (Shanghai S.) en un 12%, y, dentro de Latinoamérica, las acciones en Brasil (INBOESPA) cayeron un 41%, las de Perú (S&P/BVL) un 31% y las de Chile (SP IPSA) un 38%.

En ese mismo lapso, los bonos también han sufrido pérdidas significativas, al aumentar el riesgo de no pago de sus emisores.

La FIAP aclaró que esto no significa necesariamente que los afiliados experimentarán pérdidas, las cuales se harán efectivas solo para aquellos que deben vender sus activos para pensionarse, los que en su mayoría están en fondos más conservadores con menor volatilidad, y para quienes reaccionen precipitadamente ante la crisis saliéndose de fondos con mayores niveles de riesgo.

Los afiliados que se pensionan pueden elegir la modalidad de retiro programado, en que no se requiere la venta de buena parte de los activos previsionales, sino solo una fracción menor de éstos para el pago de la pensión.

El resto de los afiliados mantiene los activos en que están invertidos sus ahorros, a través de los cuáles son dueños de las principales acciones de sociedades anónimas del país y del mundo, bienes raíces, bonos de infraestructuras, etc., todos seleccionados por los más expertos especialistas que trabajan en las administradoras de fondos de pensiones, dentro del marco legal y bajo la estricta vigilancia del regulador.

"Es cierto que los activos de los fondos han disminuido su valor, pero siguen siendo de propiedad de los afiliados y, dada su solidez, deberían comenzar a recuperar su valor tan pronto termine esta crisis, como ha ocurrido en todas las crisis pasadas", puntualizó la nota de prensa.