Denia Caballero

Yaimé Pérez, que llego al Mundial como favorita tras liderar los resultados del año y ganar la final de la Liga de Diamante, alcanzó 69,17 metros, mientras que Caballero llegó a 68,44 metros.

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La defensora del título y vigente campeona olímpica, la croata Sandra Perkovic, se quedó con el bronce (66,72 metros).

Los metales de este viernes elevan a tres la cuenta de Cuba en este Mundial, tras el bronce de Juan Miguel Echevarría el pasado sábado en el salto largo, pero quedando con un sabor amargo porque era el favorito al oro.

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Yaimé Pérez, que este año fue campeona panamericana, nunca había subido al podio en un Mundial o Juegos Olímpicos.

Había sido cuarta en los dos últimos Mundiales.

Caballero, por su parte, logra su segunda medalla mundial tras el oro de Pekín-2015, a lo que suma el bronce olímpico de Rio-2016.

Cuba estuvo además cerca de otra medalla este viernes con la joven promesa del salto alto Luis Enrique Zayas, que terminó quinto en la final de su prueba, consiguiendo una mejor marca personal al superar la barra de 2,30 metros.