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Aficionados egipcios, consternados por la derrota a pesar de Salah
El crack del Liverpool no tuvo su mejor actuación ante los rusos.
La esperanza que nace por la presencia de Mohamed Salah se convirtió en consternación entre los aficionados egipcios después de la derrota 3-1 el martes contra Rusia, que sella prácticamente la eliminación de los Faraones del Mundial-2018.
"¡Es una catastrofe, una catástrofe!", exclama Bassem, un estudiante de 21 años que lleva la camiseta de la selección. "¿Todo esto por qué?", se lamenta, abatido por el segundo revés en este torneo.
Una derrota que significa prácticamente la eliminación de Egipto de una Copa del Mundo esperada durante mucho tiempo, después de una ausencia de 28 años, antes del último partido de la fase de grupos ante Arabia Saudita el lunes.
Miles de aficionados se reunieron en un suburbio de Giza, vecino de El Cairo, donde se habían instalado pantallas grandes y gigantes en los cafés de una gran plaza.
Un espectáculo inimaginable en el centro de El Cairo y sus alrededores, donde la policía que patrulla por las calles, especialmente la noche de los grandes partidos, previene cualquier aglomeración de personas.
La presencia tan esperada de Mohamed Salah, de vuelta tras una lesión, pareció tranquilizar a los seguidores egipcios.
La estrella del Liverpool, lesionado en la final de la Champios League a finales de mayo, estuvo en el banquillo en la derrota 1-0 en el debut de Egipto en el Mundial-2018 ante Uruguay.
"La actuación ha sido mejor que en el partido contra Uruguay porque faltaba Salah", se consuela Mohamed, un estudiante de secundaria de 16 años, que también vista la camiseta de los Faraones.
Un enorme grito de júbilo se escuchó cuando la estrella egipcia marcó de penalti, insuficiente para compensar los tres tantos anotados por Rusia.
- "Enorme frustración" -
Entre los vendedores de banderas egipcias y de los pasteles sostenidos por los refugiados sirios, los gestos y lágrimas de dolor cubrieron rápidamente las caras de los jóvenes seguidores del fútbol mientras las familias venían en tromba.
"Mi sensación en este momento es frustración, una gran frustración", exclama Rasha, una treintañera farmacéutica que sigue sonriendo junto a sus amigas, igual de expresivas.
"No me interesa mucho el fútbol, pero es la Copa del Mundo, es Salah", se entusiasma a pesar de la derrota, después de pasar la noche gritando "¡yalla! ¡yalla!" para alentar a los Faraones.
"Lo peor es que ahora nos compararemos con los sauditas", ironiza entre dos bocanadas de shisha Abdellatif, un funcionario retirado.
Arabia Saudita fue aplastada 5-0 por Rusia en el primer partido de la Copa del Mundo el jueves pasado, razón de esperanza para los fanáticos de lograr la primera victoria de Egipto en un Mundial.
