Londres anuncia acuerdo con Washington para suspender aranceles punitivos en el conflicto Airbus-Boeing

Un vehículo policial en Londres
Un vehículo policial en Londres / AFP
Afp
04 de marzo 2021 - 08:36

El gobierno británico anunció el jueves que ha llegado a un acuerdo con Estados Unidos para suspender los aranceles punitivos impuestos a una serie de productos en el marco un conflicto comercial relativo a los fabricantes de aviones estadounidense Boeing y europeo Airbus.

"Desde las destilerías de whisky escocés hasta los productores de queso Stilton, la decisión de Estados Unidos de suspender los aranceles a determinadas exportaciones británicas beneficiará a las empresas británicas en todo el Reino Unido", se congratuló el primer ministro Boris Johnson en Twitter.

El acuerdo, que de momento se aplicará durante cuatro meses, suspenderá así los aranceles del 25% impuestos por Washington al whisky escocés, la cachemira y otros productos británicos. Prevé además una "desescalada" en el conflicto comercial entre los dos fabricantes de aviones para acabar eliminándolos definitivamente.

El europeo Airbus y su competidor estadounidense Boeing, y a través de ellos la Unión Europea -de la que entonces formaba parte el Reino Unido- y Estados Unidos, se enfrentan ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) desde octubre de 2004 por las ayudas públicas a ambos grupos, consideradas ilegales.

Es el litigio comercial más largo y complicado del que se ocupa la OMC.

En octubre de 2019, se autorizó a Estados Unidos a imponer aranceles a casi 7.500 millones de dólares de bienes y servicios europeos importados cada año, la mayor sanción jamás impuesta por la organización.

Desde entonces, Washington ha impuesto un arancel del 25% a determinados productos importados de la UE, el 15% para los aviones Airbus.

En un intento de concluir este conflicto tras su salida definitiva de la UE con la aplicación completa del Brexit el 1 de enero de este año, el Reino Unido había hecho un gesto en diciembre anunciando que retiraba los aranceles británicos impuestos a los productos estadounidenses como represalia, con la esperanza de obtener una reciprocidad que ahora logró, aunque temporalmente.

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