Rousseff confía que economía de Brasil se recuperará y su popularidad también

Dilma Rousseff toma posesión como presidenta reelecta de Brasil
Dilma Rousseff, presidenta de Brasil.
Afp
10 de julio 2015 - 16:34

La presidenta brasileña Dilma Rousseff estimó que la caída en su popularidad (9%) es producto de una "situación económica adversa" de la que el país se va a recuperar.

"En cualquier país hay caídas de popularidad, la mía deriva de una situación económica bastante adversa. Tengo la seguridad que eso va a mejorar y lo que importa es, sin dudas, que estamos trabajando duro para sacar a Brasil de esa situación de crisis", dijo en una entrevista en Rusia al canal RT, que fue transcrita por su despacho y divulgada en Brasil este viernes.

En medio de una economía estancada con la inflación y el desempleo creciendo progresivamente, Rousseff es asediada por las revelaciones del escándalo de corrupción en la petrolera estatal Petrobras, que ha levantado voces, según ella "golpistas", que piden su salida.

La mandataria participó en Ufá, en los montes Urales, de la cumbre del grupo BRICS (Brasil, Rusia, China, India y Sudáfrica), en la que se concretó la formación de un banco de desarrollo propio, acordado en 2013, para financiar proyectos de gran envergadura.

"Hay una carencia inmensa de fondos de inversión a largo plazo, el banco va a ocupar ese lugar y con eso aumentar los recursos disponibles para invertir, en una primera fase para los miembros de los BRICS y luego para otros países interesados", destacó.

La entidad tiene un capital estimado de 100.000 millones de dólares y cuenta además con un fondo común de reservas de cambio de otros 100.000 millones de dólares.

Y Brasil hará sus aportes sin contratiempos porque su crisis económica es "pasajera", insistió Rousseff.

"Estamos experimentando los efectos de la crisis internacional. Conseguimos pasar el peor momento. Tenemos seis años impidiendo que la crisis afecte el desempleo y la renta del pueblo brasileño. Pero hay un límite en esta situación", explicó la presidenta, insistiendo en que la economía de su país tiene "bases sólidas".

La inflación brasileña cerró junio en 8,89% en 12 meses y el gobierno calcula que la economía cerrará 2015 con una contracción de 1,2%. El PIB creció apenas 0,1% en 2014.

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