Netanyahu será el primer jefe de Gobierno israelí en visitar América Latina

El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, se convertirá próximamente en el primer jefe de Gobierno de este país en hacer un viaje oficial a América Latina, con visitas previstas para el próximo septiembre a México y Argentina.

"Puedo confirmar que será el primer primer ministro en hacer un viaje a América Latina", declaró a Efe un portavoz del Ministerio de Exteriores que, sin embargo, declinó precisar por el momento las fechas y la ruta de la gira de Netanyahu.

Medios israelíes recogen la intención del jefe del Gobierno, que también ostenta la cartera de Exteriores, de viajar a México DF y a Buenos Aires, previsiblemente justo antes de su viaje a Nueva York para participar en la Asamblea General de la ONU, donde pronunciará un discurso el 19 de septiembre.

"Los viajes todavía no se han ultimado, pero están en un estado avanzado de planificación y se espera que tengan lugar a mediados de septiembre. Si todo va como está previsto, Netanyahu irá a Argentina y México, y desde allí a Nueva York", aseguró esta semana el diario "Jerusalem Post".

"El viaje coincidirá con el 70 aniversario de la aprobación en la ONU del Plan de Partición" que dio origen al nacimiento de Israel y que apoyaron 13 países latinoamericanos y caribeños, entre otros 33 Estados, recuerda el rotativo.

En 2014, Netanyahu tenía previsto visitar México, Panamá y Colombia, pero no pudo viajar por una larga huelga de los empleados del Ministerio de Exteriores, que se negaron durante meses a colaborar en la organización de sus viajes al extranjero.

En poco más de un año, el dirigente ha visitado Kazajistán, Singapur, Australia y cinco países africanos.

La actividad diplomática en América Latina, sin embargo, ha sido tradicionalmente de más bajo perfil y nunca ha incluido desplazamientos de un jefe de Gobierno israelí.

Recientemente, el secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, realizó una breve visita a Israel, donde mostró su apoyo al país, al que consideró un símbolo en la región de los valores de la organización: democracia y derechos humanos.