Kerry protesta ante Lavrov por visita de iraní e insiste en tregua en Ucrania

El secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, protestó hoy ante su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, por la visita a Moscú de un jefe militar iraní sujeto a una prohibición internacional de viaje desde 2007 y urgió a implementar un alto el fuego inmediato en Ucrania tras el aumento de ataques.

En una conversación telefónica, Kerry "expresó su preocupación sobre el viaje a Moscú" de Qasim Suleimani, el jefe de las fuerzas Quds iraníes, según indicó hoy a los periodistas un alto funcionario del Departamento de Estado, que pidió el anonimato.

Las fuerzas Quds son la unidad de elite y operaciones internacionales de la Guardia Revolucionaria iraní y su jefe habría viajado a Moscú el pasado 24 de julio, contraviniendo las sanciones impuestas en su contra por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, según medios estadounidenses.

Un portavoz del Kremlin aseguró la semana pasada que desconoce si el general Suleimani había visitado Rusia, y la llamada telefónica de hoy confirma que el Gobierno estadounidense cree que sí.

Suleimán está sujeto a una prohibición internacional de viaje desde 2007 y es considerado un terrorista por Estados Unidos, que dictó sanciones en su contra en 2005.

En su conversación telefónica de hoy, Kerry expresó además a Lavrov su "profunda preocupación por el intenso aumento de ataques en el este de Ucrania, y urgió a un alto el fuego inmediato y a la implementación completa de las obligaciones (de los acuerdos) de Minsk", afirmó el funcionario.

El mando militar ucraniano denunció hoy el recrudecimiento de los ataques de las milicias separatistas prorrusas en el este de Ucrania, donde este miércoles registró más de 150 violaciones al alto de fuego declarado en febrero de este año.

Respecto a Siria, Kerry y Lavrov "acordaron seguir explorando opciones para una solución política para el conflicto", según la fuente.

Por último, Kerry expresó su preocupación por "la legislación pendiente en Rusia que limitaría las actividades de las organizaciones no gubernamentales".

A finales de julio, la Fiscalía General rusa declaró "indeseable" a la ONG estadounidense Fundación Nacional para la Democracia, al entender que su actividad en Rusia "amenaza el orden constitucional, la capacidad de defensa y la seguridad del Estado".