"Producto de una megaoperación (…) se desmanteló un campamento de entrenamiento de sicarios y un narcolaboratorio a la MS-13" entre los departamentos de Francisco Morazán y Olancho, unos 100 km al este de la capital, indicó la policía en un comunicado.

El campamento denominado "La Escuelita", utilizado para la enseñanza, práctica y adiestramiento en uso de armas, estaba en una zona montañosa y también servía para la planificación de acciones criminales.

Seis cabecillas de la pandilla, con antecedentes policiales por asesinatos, homicidios y asociación ilícita, fueron capturados durante la operación, en la que los policías decomisaron cuatro escopetas, un fusil AK-47, una pistola, cargadores, municiones, chalecos antibalas y otros pertrechos.

Las pandillas MS-13 y la Barrio 18 atemorizan comunidades de las principales ciudades de Honduras, Guatemala y El Salvador, con asesinatos, extorsiones y narcotráfico, y la mayoría de esos crímenes quedan en la impunidad.