En Bosnia, bajo la nieve, centenares de migrantes esperan un refugio
La nieve caía el viernes sobre centenares de migrantes sin abrigo atrapados en Bosnia en la ruta hacia Europa, a la espera de un refugio temporal desde que su campamento fue víctima de un incendio hace más de dos semanas, presenció un fotógrafo de la AFP.
Las temperaturas son glaciales en los restos del campamento de Lipa, en el noroeste de Bosnia, cerca de la frontera con Croacia, miembro de la Unión Europea. La niebla está presente muy a menudo y la región está cubierta por la nieve.
El campamento, donde vivían más de 1.300 migrantes, esencialmente paquistaníes y afganos, fue arrasado por un incendio el 23 de diciembre, tras la retirada de la Organización internacional de Migraciones (OIM), que gestionaba el lugar.
Centenares de migrantes esperan desde entonces recogidos en una veintena de tiendas de campaña instaladas en la zona por el ejército bosnio, muchas de ellas en un bosque aledaño.
"No hay agua, ni electricidad, ni duchas. Nieva, llueve, la gente no tiene medicamentos. Todo son problemas. Apenas tenemos con qué comer", declaró a la AFP Assad Ali, paquistaní de una treintena de años.
Las tiendas provisionales, que estarán equipadas de calefacción y podrán acoger a unas 900 personas, serán utilizables "en los próximos días", declaró el alcalde de Bihac, Suhret Fazlic.
Los voluntarios de la Cruz Roja distribuyen por el momento víveres a un millar de personas, explicó a la AFP Selam Midzic, responsable local de la organización.
La OIM justificó su retirada de Lipa ante el hecho de que el campamento no era apto para pasar el invierno. La policía bosnia sospecha que los migrantes prendieron fuego al campamento para denunciar su situación.
