Francisco Sagasti jura como nuevo presidente de Perú

Francisco Sagasti jura como nuevo presidente de Perú
Francisco Sagasti jura como nuevo presidente de Perú / AFP
Afp
17 de noviembre 2020 - 17:33

Lima/El centrista Francisco Sagasti asumió este martes como nuevo presidente de Perú, el tercero en ocupar el cargo en ocho días de crisis política.

"Juro por la patria y todos los peruanos que ejerceré el cargo de presidente", declaró en una sesión plenaria del Congreso el ingeniero de 76 años, que deberá gobernar hasta el 28 de julio de 2021.

Perú, que este martes estrena su tercer presidente en ocho días, fue cuna de una gran civilización, tiene un invaluable patrimonio arqueológico y una famosa gastronomía, pero posee triste fama por su debilidad institucional.

Débiles instituciones

De los nueve presidentes que ha tenido Perú tras el fin del régimen militar en 1980, siete fueron condenados, o salpicados por escándalos o tienen investigaciones de la fiscalía en curso.

Alberto Fujimori cumple condena por crímenes y corrupción. Alan García, Alejandro Toledo, Ollanta Humala y Pedro Pablo Kuczynski quedaron bajo la lupa por el escándalo de Odebrecht. Martín Vizcarra es investigado por supuestos sobornos cuando era gobernador, y Manuel Merino por la muertes de dos manifestantes.

Sólo Fernando Belaunde Terry (1980-1985) y Valentín Paniagua, que gobernó ocho meses en 2000-2001, salieron indemnes.

Los últimos 20 años desde la caída del presidente Alberto Fujimori, son uno de los periodos más largos de democracia que ha vivido Perú, pues en los siglos XIX y XX predominaron los regímenes militares o civiles autocráticos.

La ausencia de partidos políticos fuertes genera además que en el Congreso peruano primen muchas veces los intereses personales: unos legisladores apoyaron la destitución de Martín Vizcarra para salvar a una universidad privada que va a perder su licencia.

Un imperio y su legado arqueológico

Con capital en Cusco, el imperio inca ocupó una vasta franja territorial en Sudamérica, desde el sur de Colombia, hasta Chile y Argentina. Floreció en el siglo XV y fue conquistado por los españoles en el siglo XVI, pero su legado sigue vivo.

Un símbolo de su grandeza es la ciudadela de piedra de Machu Picchu, que en 2019 recibió 1,5 millones de visitantes, según el ministerio de Turismo, pero que este 2020 estuvo cerrado casi ocho meses por el coronavirus.

Hay además magníficas edificaciones y otros monumentos incas en Cusco y otros lugares. Cuatro de los 32 millones de peruanos tienen todavía por idioma materno el quechua que hablaban los incas.

La civilización inca destacó a lo largo del siglo XV por su mitología, religión, cultura, imperio y organización territorial.

Antes que ellos florecieron otros pueblos en los valles y costas de Perú, como el Mochica, Chimú y Nasca.

Exquisita gastronomía

Junto al patrimonio arqueológico, la gastronomía peruana es otro de los imanes para los cuatro millones de visitantes extranjeros que solía recibir el país cada año hasta la pandemia.

El cebiche de pescado -un pescado crudo adobado-, el lomo saltado -carne de res con papas fritas y arroz-, el ají de gallina -crema espesa con pollo deshilachado- o las papas a la huancaína -papas bañadas con una salsa cremosa de queso y chile-, junto al célebre cóctel pisco sour y una variedad de cereales andinos y productos del mar, son parte de la variada oferta culinaria que atrae a turistas.

Hay precios para todos los bolsillos. Si bien en Lima hay dos de los diez mejores restaurantes del mundo según la lista World's 50, el Central y el Maidó, cada barrio humilde también tiene sus buenos restaurantes, pues a los peruanos les importa comer bien.

Multiculturalidad

Perú es un país multicultural, donde conviven diversas comunidades, entre ellas los criollos que descienden de los españoles, los nativos quechuas, aimaras y amazónicos, los de origen africano (descendientes de antiguos esclavos), a los que se suman inmigrantes de China y Japón.

Si bien el español es la lengua más hablada, existen millones de peruanos que tienen un idioma materno diferente, como el aymara, el quechua o el ashaninka y otros idiomas amazonicos.

El terror de Sendero

Perú vivió dos décadas de conflicto armado interno desde 1980 a 2000. Fue iniciado por Sendero Luminoso, grupo guerrillero fundado en la región andina de Ayacucho por el profesor universitario de filosofía Abimael Guzmán (preso a perpetuidad desde 1992).

Guzmán ganó miles de adeptos entre campesinos pobres con un mensaje que mezclaba principios maoístas con el antiguo mito inca del 'Taki Ongoy' (canto de estrellas).

El Taki Ongoy había inspirado rebeliones indígenas en la colonia, entre ellas la de Túpac Amaru. Básicamente, el mensaje era que tomar el poder por las armas permitiría reconstruir el imperio inca, lo que traería justicia social.

El conflicto, en el que también participó el guevarista MRTA, dejó unos 70.000 muertos, según la Comisión de la Verdad. Todos los bandos cometieron crímenes y excesos, incluidas las fuerzas militares.

Temas relacionados

Si te lo perdiste
Lo último
stats