Gobierno colombiano pide superar crisis en la frontera "sin promover el odio"

El Gobierno colombiano pidió hoy a las autoridades venezolanas buscar soluciones conjuntas para superar la crisis que se vive en la frontera común a raíz del cierre del paso entre el estado Táchira (Venezuela) y el departamento de Norte de Santander (Colombia), pero "sin promover el odio".

"No es cerrando la frontera ni deportando colombianos como vamos a resolver los problemas de estas zonas", señalaron en un comunicado los ministerios colombianos de Relaciones Exteriores y del Interior.

La declaración, difundida tras la visita efectuada este lunes a esa zona por la canciller colombiana, María Ángela Holguín, y su colega de Interior, Juan Fernando Cristo, indicó que "es a través de la cooperación y no de la confrontación" como se logrará combatir fenómenos como el de contrabando que afecta a ambas naciones.

"Reiteramos la importancia de buscar mecanismos conjuntos para superar la problemática que se vive en la frontera, pero sin promover el odio", agregó el documento.

El miércoles pasado, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció el cierre durante 72 horas del paso fronterizo entre Cúcuta, la capital de Norte de Santander, y Ureña y San Antonio, en el Táchira, a raíz de un ataque en ese país que dejó tres militares venezolanos y un civil heridos.

Maduro decretó dos días después el estado de excepción en Táchira y desde entonces se inició la deportación masiva de colombianos que, según las autoridades venezolanas, permanecían indocumentados en ese país.

Más de 1.000 colombianos han sido deportados desde Venezuela, según los últimos registros de Migración Colombia, entidad que controla la circulación de personas en las fronteras nacionales.

Los últimos 42 entraron hoy a Colombia por el departamento de La Guajira (norte) y se suman a los 1.071 que hasta ayer fueron recibidos en Cúcuta por las autoridades colombianas, entre ellos decenas de niños que fueron repatriados.

En su pronunciamiento, los ministerios indicaron que los "señalamientos personalizados solo generan sentimientos xenófobos que no benefician en nada" a los habitantes de las ciudades de las zonas fronteras.

"Es desafortunado dedicarse a buscar culpables de lo que está sucediendo cuando lo que debemos es buscar soluciones al fenómeno del contrabando", añadieron.

Además hicieron un llamado a los dirigentes políticos de ambos países para que no que caigan en "la tentación facilista de utilizar la compleja situación" que se vive en la frontera con fines electorales o "para conseguir réditos políticos".

"La agresividad que oímos de lado y lado de la frontera no ayuda para nada a resolver la difícil situación, así como tampoco se entiende que se pretendan sacar beneficios políticos de una lamentable situación de nuestros compatriotas", según el comunicado.

De igual forma, indicaron que "deben ser rechazados" los "adjetivos y las descalificaciones personales" en contra del expresidente colombiano y senador Álvaro Uribe.

El documento se conoció un día antes de que la canciller Holguín y su colega venezolana, Delcy Rodríguez, se reúnan en la ciudad colombiana de Cartagena de Indias (norte), para buscar una solución a esta crisis