'Autoridades deberán reorientar agenda pública y priorizar en salud y educación'

Leonor Calderón, exministra de Desarrollo Social y exrepresentante de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en El Salvador, Guatemala y México, manifestó que todos los efectos que ha causado la pandemia generan consecuencias en las familias.

Con la llegada de la COVID-19, cambiaron los ingresos de cada persona y así también las prioridades de la sociedad.

Lo que el Estado deberá plantearse es la reorientación de toda la agenda pública y del presupuesto, donde se impongan nuevas prioridades y la salud pública debe ser lo más importante, al igual que la educación.

“La pandemia está siendo una maestra cada día y nos está elaborando la agenda y si queremos irnos por otro lado y no escucharla es otra cosa, se tienen que fortalecer las instituciones del Estado”, expresa Calderón.

Recalcó que, si bien el Estado tiene la obligación de ayudar a la población a salir adelante, la responsabilidad de superarlo es de la sociedad en su conjunto, sin embargo, se le debe garantizar la protección a los sectores que han sido colocados en un mayor nivel de vulnerabilidad.

En ese sentido destaca el tema de los niños, adolescentes y personas jóvenes que están en pobreza, donde se ha visto el problema que enfrentan en los centros en los que se encuentran. Aclara que la mayoría de los niños que están en albergues no son huérfanos, sino que son entregados porque están en riesgo social.

Destaca que el número de menores en situación de vulnerabilidad y riesgo se va a incrementar, ante el aumento de familias que no tendrán manera de hacerse cargo de sus niños.

Sostuvo que las estimaciones indican que el Producto Interno Bruto (PIB), va a caer al menos 9%, el desempleo aumentaría entre un 20 y 25%, más del doble de lo que hay en la actualidad; la informalidad aumentará al 55%. Además, muchas pequeñas y microempresas no sobrevivirán.