La 65ª Berlinale, un festival de mujeres rebeldes

Una albanesa huye de su destino de esposa, una indígena maya sueña con una vida distinta a la que lleva en la ladera de un volcán en Guatemala: los personajes femeninos rebeldes o en búsqueda de más libertad fueron protagonistas en la 65ª edición de la Berlinale.

"Vergine giurata" (virgen jurada), primer largometraje de la italiana Laura Bispuri de 37 años, proyectado el jueves en competencia por el Oso de Oro, cuenta la historia de Hana, una joven de una localidad remota de Albania, interpretada por Alba Rohrwacher ("Las maravillas", Gran Premio en 2014 del Festival de Cannes).

Tras negarse a ser una esposa con derechos limitados en una sociedad patriarcal decide convertirse en "virgen jurada" según el código tradicional albanés, es decir vivir como un hombre. Tras hacer voto de castidad, se viste como hombre, lleva nombre de varón y sacrifica su feminidad para ser más libre.

Diez años más tarde, esta mujer que desafió su destino decide volver a cambiar de vida otra vez y viajar a Milán donde vive su hermana. Allí descubrirá su cuerpo y su sexualidad junto al aprendizaje de una nueva libertad.

La película, que multiplica idas y vueltas entre el presente de Hana y su pasado, "es un viaje exterior, pero también interior, que aborda la cuestión de la libertad y la feminidad", explicó Laura Bispuri a la prensa tras cosechar sus aplausos en el estreno.

Según la cineasta, el cuerpo es un elemento central en el filme, que invita además "a una gran reflexión sobre la feminidad" y es "una metáfora de la relación entre las mujeres libres y el mundo".

"Son temas universales", comentó. "Pienso que todos deberíamos preguntarnos '¿acaso las mujeres son tan libres hoy en día?'"

Construir su propio destino

"Vergine giurata" se suma a otros filmes que abordaron en la Berlinale la temática de mujeres que luchan por salir del lugar preestablecido que les adjudica la sociedad.

En "Ixcanul", opera prima del guatemalteco Jayro Bustamante, que también fue muy bien recibida por la crítica, María es una joven maya de 17 años, que trabaja con sus padres en una plantación de café en la ladera de un volcán. Sueña con abandonar su rutina e irse a Estados Unidos.

Involuntariamente queda embarazada, se verá confrontada a una situación dramática e intentará rebelarse. "Quise mostrar qué le pasa a esta mujer, qué es lo que siente, qué es lo que piensa, y cómo con total dignidad asume lo que le toca vivir, porque no hay otra manera", explicó el cineasta de 37 años a la AFP.

En la película del francés Benoît Jacquot "Diario de una camarera", nueva adaptación de la novela homónima de Octave Mirbeau con Léa Seydoux en el papel protagonista de Célestine, una mucama se rebela contra su condición en los albores del siglo XX.

Fuerte, determinada y ambiciosa, la mujer intenta escapar a su condición, a la crueldad de las relaciones sociales y la brutalidad masculina. Quiere no tener más amos, pero nunca lo logra por completo.

"Al igual que los esclavos, ella interiorizó su servidumbre", comentó Benoît Jacquot.

Otras heroínas de vanguardia o en búsqueda de emancipación pueblan los filmes en competencia por el Oso de Oro, que se anunciará el sábado.

En "Reina del Desierto" del alemán Werner Herzog, Nicole Kidman encarna a una aventurera, espía y analista política de Medio Oriente, además de brillante arqueóloga Gertrude Bell.

Juliette Binoche interpretó por su parte el papel de Josephine, esposa del explorador polar Robert Peary, que parte a la búsqueda de su marido en "Nadie quiere la noche" de la española Isabel Coixet, también en competencia.

Como lo había anticipado antes del evento el propio director de la Berlinale, Dieter Kosslick, "las mujeres fuertes confrontadas a situaciones extremas" fueron protagonistas en el festival. Queda por ver qué lugar les reserva el palmarés.