Conferencia Episcopal Panameña se une al debate sobre uniones igualitarias

La Conferencia Episcopal Panameña (CEP) expresó su opinión sobre las uniones igualitarias en un comunicado, emitido este viernes 19 de mayo. Sostiene que se opone a “privilegios" que puedan equipararse al matrimonio entre un hombre y una mujer.

“Para tutelar eficazmente los derechos de las personas que sienten atracción por el mismo sexo no es necesario, ni prudente, someter a la institución matrimonial a modificaciones artificiosas o a una reingeniería social contraria a su naturaleza y dinamismo. Hacerlo es una apuesta arriesgada, cuyas consecuencias negativas no logramos todavía vislumbrar”, detalla la nota.

La Conferencia Episcopal destaca que comparten la obligación de "eliminar toda forma de discriminación injusta que pueda ser ejercida contra las personas que sienten atracción por el mismo sexo o contra cualquier otro ciudadano".

Sin embargo, el comunicado agrega que la regulación jurídica de las uniones igualitarias en el ámbito de los derechos civiles y patrimoniales difiere de brindar un reconocimiento como matrimonio, que subvierte "el orden establecido por la naturaleza humana y por nuestro marco constitucional y legal".

"Las autoridades competentes, en cumplimiento de su alta responsabilidad, no debe ligeramente plegarse a hechos sociales, a presiones mediáticas o de grupos de interés, para otorgar “derechos” que afectan al matrimonio natural entre un hombre y una mujer. Su compromiso es legislar para la promoción del bien común y de la justicia", manifiestan.

La Iglesia católica resalta, en el comunicado, que la familia y el matrimonio "no responden a una ordenación política, jurídica o cultural meramente coyunturales".

"En realidad, anteceden a la religión, al Estado y a sus leyes, 'imponiéndose' a ellos, tal cual son, en virtud de su intrínseca fuerza y belleza", expresan.

La legalización de las uniones igualitarias ha sido debatida en las últimas semanas luego que se presentara a la Corte Suprema de Justicia (CSJ) una demanda de inconstitucionalidad contra el artículo 26 del Código de Familia que establece que el matrimonio es la unión entre un hombre y una mujer.