Ser maestro: una profesión que demanda vocación y esmero

Conmemorando el día del educador / Kelyneth Pérez

El Día del Maestro, es una fecha especial para reconocer la labor de aquellos docentes abnegados que tienen esa vocación de enseñar sin importar los obstáculos que tengan para hacerlo.

Leslin Camarena, madruga todos los días para llegar a su salón de clases, el único que existe en la comunidad de El Porvenir de Cerro Pelado en la comarca Ngäbe Buglé, un área de difícil acceso.

Su mayor sueño, es ver a sus alumnos convertidos en profesionales.

El Porvenir, es una escuela rancho multigrado, construida en la casa comunal del pueblo. La maestra, cuando sale de dar clases, sigue estudiando para brindarle lo mejor a sus estudiantes.

Como la maestra Leslin, hay miles de docentes que dan el todo por sus estudiantes.

En la escuela María Ossa de Amador en la capital, conocimos a la profesora María Del Carmen, quien todos los días se confecciona un sombrero nuevo para llamar la atención de sus estudiantes de kinder. De esta manera se asegura que todos se concentren en ella.

La profesora Dalis, le encantan las actividades extracurriculares, cuando hay alguna ahí está ella, pero le ha tocado enfrentar situaciones difíciles, como la muerte de un estudiante al cual ayudó en su momento.

Ser maestros, es una profesión que requiere mucha vocación, ya que se convierten en un modelo para todos aquellos estudiantes e incluso ven a una segunda madre o un segundo padre.

Con información de Kelineth Pérez

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