Familia de sargento asesinado del Senafront en Panamá Este reclama justicia

La familia del sargento segundo del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), Julio Guzmán, quien falleció el pasado lunes 27 de febrero en manos de unos delincuentes que lo atacaron para robarle el arma de reglamento, reclama justicia tras su muerte.

Julio Guzmán murió en el ejercicio de su deber, cumpliendo con la promesa que hacen todos los miembros de la fuerza pública al entrar a un estamento de seguridad. Dar su vida a costa de lo que sea por su patria.

Su madre, sentada en la parte de afuera de su casa, contó a TVN Noticias todo lo que le dijo su hijo horas antes de ser asesinado.

Esta madre, que no encuentra consuelo, pide que se haga justicia por la muerte de su hijo y que sus responsables sean castigados como debe ser.

"Quiero que le hagan justicia porque él vino de lejos a brindar apoyo acá", comentó la madre del sargento, Ecolastica Guzmán.

En la casa de la madre de Julio ya está colocado el altar con una vela, flores y una fotografía de este valiente hombre que laboró casi 15 años en el Senafront.

Para él, como muchos otros, no había límites en el trabajo que realizaba.

"Le pido al presidente, de corazón, que haga una ley para proteger a los policías. (...) No son alguien sin sombra. Ellos nos están protegiendo, nos están cuidando", expresó el Roberto Card, tío del sargento Guzmán.

Julio vivía en Yaviza junto a su esposa e hijos, por los que daba su vida entera para que a ellos no les faltara nada. Él era el sustento del hogar.

La familia de Julio Guzmán está de luto, así como sus compañeros del Senafront pero confiados en Dios que esta muerte no quedará impune y que a los hijos de Guzmán no les faltará nada, de ahora en adelante, en ausencia de su padre.