Exalumnos piden evidencias en investigación sobre libros del Instituto Nacional

Libros del Instituto Nacional

Ex institutores exigen declaraciones sobre los libros del Instituto Nacional / Kayra Saldaña

Este lunes 13 de junio, la educadora y escritora Ileana Gólcher, junto a un grupo de exinstitutores e historiadores, dijeron que se encuentran inconformes sobre las recientes declaraciones de la ministra de Educación, Maruja Gorday de Villalobos, sobre las investigaciones de los libros del Instituto Nacional.

El pasado 23 de mayo del presente año, estudiantes del Instituto Nacional denunciaron la desaparición de más de 9,000 libros que pertenecían a la biblioteca del plantel.

Se notifico que miles de libros de la Biblioteca del Instituto Nacional, fueron salvados. Sin embargo, no se han mostrado evidencias. De igual forma se encuentran insatisfechos con el resultado de la auditoría realizada en este caso, en donde se señaló que gran parte se había deteriorado por ácaros.

Golcher indicó que se procedió con el desalojo de los libros sin realizar una consulta y sin mostrar evidencias del evidente deterioro. Agregó que, en Panamá, existen una serie de instituciones como la Biblioteca Nacional, en donde se podría haber realizado el rescate de estos libros.

El grupo indicó que el resultado de estos hechos se debe a la falta de supervisión por parte del Meduca y la falta de personal idóneo para el tratamiento de estos libros.

Se comunicó que por este caso se interpuesto ante las autoridades un habeas data, el cual fue admitido por la Corte Suprema de Justicia. Además, indicaron que se solicito la ayuda de la Unesco para resolver este caso.

Adicionalmente, se aprovechó la ocasión para solicitar a las autoridades que se le brinde un mayor presupuesto a esta institución, debido a que solo cuentan con un restaurador, por lo cual necesitan más recursos humanos y materiales para suplir la demanda de restauración.

Recientemente se informó que el Meduca estará realizando la planificación para la remodelación y equipamiento de la biblioteca.

Por su parte, los alumnos recomendaron que la remodelada biblioteca debe contener sistemas de calefacción, aire acondicionado, filtros y termómetros que permitan crear un microclima propio en el que estén reguladas la temperatura, la humedad, la acidez y la ventilación.

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