TVN Investiga: Educar es incluir

A diferencia de otros niños, María del Pilar, utiliza el sistema braille para leer y escribir. A los seis años un tumor cancerígeno le robo la visión, desde entonces lucha por alcanzar sus sueños como parte de la población estudiantil con necesidades especiales.

La población estudiantil panameña con necesidades especiales supera los 14 mil estudiantes.

En Panamá, la población de personas con discapacidad va en aumento, pasando de 3% en 2010 a cerca de 10% de la población en el 2015.

La Unesco define la educación inclusiva como el «derecho de todos los alumnos a recibir una educación de calidad que satisfaga sus necesidades básicas de aprendizaje y enriquezca sus vidas».

La educación inclusiva debe caracterizarse por prestar especial atención a los grupos marginales y vulnerables con una voluntad integradora, buscando la máxima calidad y el desarrollo del máximo potencial de cada persona.

Solo el 60.6% de las personas con discapacidad termina sus estudios secundarios, mientras que el 9.4% de la población con discapacidad alcanza obtener un título universitario.

Según el último censo de 2010 la población discapacitada solo en las comarcas indígenas alcanza los 5 mil 666 casos. Los casos de discapacidad que se reportan con mayor frecuencia son en su orden: la ceguera, sordera, parálisis cerebral, deficiencia física y problemas mentales.

El pasado 14 de abril, el pleno de la Asamblea Nacional (AN) aprobó el proyecto de ley 309, que reformó la ley 42, que regula la equiparación de oportunidades para las personas con discapacidad: la meta es alcanzar equidad, eliminando cualquier tipo de discriminación.