Indígenas esperan hoy al presidente Varela en Barro Blanco
Los indígenas ngäbes buglé esperan hoy en Barro Blanco al presidente Juan Carlos Varela y han garantizado que no tomarán acciones de violencia.
Según dirigentes de la Comarca Ngäbe Buglé, el presidente Varela llegará a la región a las 9:00 de la mañana de hoy.
Los dirigentes retuvieron ayer al viceministro de Asuntos Indígenas, Irene Gallegos, con el propósito de presionar al presidente de la república a llegar al lugar.
El viceministro de Asuntos Indígenas, Irene Gallego, fue retenido durante unas horas este martes por miembros de la etnia Ngäbe-Buglé de Panamá, en una zona muy cercana al lugar donde se construye la hidroeléctrica Barro Blanco, en el municipio Tolé, unos 400 kilómetros al oeste de la capital panameña.
El grupo había puesto como condición para dejar salir del lugar a Gallego que el presidente Varela se presentara para que explicara las implicaciones de la suspensión temporal del proyecto hidroeléctrico ordenada ayer por el Gobierno, que argumentó problemas medioambientales.
"Él (Gallego) se retiró", después de que el grupo de indígenas recibió "directamente" de la Presidencia la información de que Varela se reunirá con ellos "mañana a las 9 de la mañana" en Tolé, dijo a Efe fiscal de la iglesia Mama Tadta, Eulogio Bordones.
El secretario de Comunicación del Estado, Manuel Domínguez, confirmó a Efe que el presidente Varela se trasladará "mañana (miércoles) a primera hora" a Tolé, a 400 kilómetros de la capital panameña, para hablar con los indígenas.
Los indígenas se quejaron este miércoles de que pese al anuncio de la suspensión del proyecto hidroeléctrico, las máquinas seguían "trabajando", por lo que exigieron la presencia del jefe del Estado, explicó Bordones.
El Gobierno panameño anunció el lunes la suspensión temporal de las obras de la hidroeléctrica Barro Blanco alegando incumplimiento en materia medioambiental por parte de la empresa encargada del proyecto la hondureña Generadora del Istmo S.A. (Genisa).
Una Comisión de Alto Nivel gubernamental panameña, que visitó el lugar de la construcción y también se reunió con líderes indígenas de la zona, detectó que Genisa ha incurrido en más de una decena de faltas al Estudio de Impacto Ambiental (EIA), según la información oficial.
El gerente de Genisa, el guatemalteco Aldo López, dijo ayer mismo desconocer las violaciones al EIA señaladas por el Gobierno y alertó que la decisión "unilateral" de suspensión en pleno verano, pone en peligro la conclusión de la obra, que registra un 95 % de avance.
El proyecto prevé generar 28,56 megavatios a la producción general de energía de Panamá, que tiene una capacidad instalada de generación de 2.653,66 megavatios, de acuerdo a los datos oficiales.