El caso de las jóvenes extranjeras que fueron obligadas a prostituirse en Panamá

El Ministerio Público informó la tarde de este miércoles 15 de marzo que la Fiscalía contra la Delincuencia Organizada, del Ministerio Público, fue notificada de la Sentencia proferida de 15 años de prisión, por el delito de Trata de Personas contra tres extranjeros.

Los ciudadanos sentenciados por la justicia panameña son los brasileños Anderson Correa Do Santos, Henrique Rodriguez Da Silva y la venezolana Kimara Consolación Chirinos.

Destaca la nota de prensa que la Fiscalía contra la Delincuencia Organizada, logró probar el hecho, mediante diligencias de vigilancia, allanamiento y seguimiento, ubicando evidencias documentales y testimoniales que vinculan a los señalados con los hechos de trata de personas.

En la fase de alegatos la fiscalía pidió sentencia condenatoria para los cuatro investigados por el delito Contra La Humanidad, en la modalidad de Trata de Personas descrito en el título XV, Capitulo IV, del Código Penal.

La juez acogió la petición de la fiscalía indicando que existía un caudal de pruebas que se aportaron en el proceso, las cuales llevan a concluir, que se organizó una actividad ilícita para la Promoción, financiamiento y publicidad de la prostitución en Panamá, que tenía como objetivo la Trata de Personas a través de operaciones ilícitas debidamente acreditadas en el proceso por lo cual se acoge la solicitud de la Fiscalía del Crimen Organizado.

El proceso penal se inicia por una denuncia interpuesta por una joven de nacionalidad venezolana, la cual puso en conocimiento el día 23 de julio de 2015, cómo ella efectúo su viaje a Panamá junto con otras dos jóvenes, a las cuales les prestaron 3,800 balboas, les ofrecieron hospedaje y posteriormente las introdujeron a trabajar en un lugar dedicado a la prostitución en el área de San Felipe, para que pudieran mediante abonos diarios de 300 balboas pagar lo que se les prestó para ingresar a Panamá.

Las jóvenes venezolanas lograron fugarse de sus tratantes y llegar a un hotel de la localidad donde posteriormente procedieron a denunciar los hechos de los cuales fueron víctimas, indicando además que habían sido amenazadas y obligadas a trabajar en prostitución.