El laberinto de Laurentino Cortizo y sus 8,760 horas en el poder

El 1 de julio del 2019, Laurentino Cortizo se colocó la banda presidencial y desde ese momento empezaría su recorrido por un laberinto político para encontrarle salida a cada uno de los problemas nacionales.

Cortizo recibió un Panamá con temas por resolver a nivel de corrupción, seguridad, desaceleración económica, educación, desigualdad social, entre otros. La pandemia por el COVID-19 sería la vorágine que dejaría en evidencia que a nivel de salud estamos peor de lo que pensábamos y que la falta de oportunidades es más grave de lo que algunos expertos se imaginaban. Se rompió la burbuja. Descubrimos que no somos el Dubái de las Américas.

Han pasado 8,760 horas desde que el Partido Revolucionario Democrático (PRD) regresó al poder de la mano de “Nito” Cortizo. Un Presidente que en su discurso se caracteriza por hablar en tercera persona y que prometió muchos cambios en todos los niveles de la vida nacional.

Fue aplaudido por cumplir la promesa de crear el Ministerio de Cultura, por los nombramientos de nuevos magistrados de la Corte Suprema de Justicia y del procurador de la Nación, Eduardo Ulloa.

La creación de los programas “Estudiar sin hambre”, "Plan Colmena" y las modificaciones a la Ley que crea la Beca Universal, también fueron objeto de elogios.

Sin embargo, para sus críticos todavía hay promesas que están lejos de cumplirse y la pandemia ha provocado que el gobierno sufra el peor desgaste de una administración gubernamental en tan poco tiempo.

“Este primer año de Gobierno del presidente Cortizo tiene más sombras que luces, lamentablemente para el país. Sin lugar a dudas es el gobierno cuyo deterioro ha sido el más acelerado que hemos tenido en época democrática”, destacó Temi De Obaldía, empresario y consultor político.

La crisis sanitaria no es la excusa para decir que las cosas están mal desde que apareció el virus. “Desde antes de iniciada la pandemia ya veníamos advirtiendo que la dinamización, el empuje que se necesita no estaba llegando”, aseguró la diputada por el partido Cambio Democrático, Ana Giselle Rosas.

“El primer año de gobierno ha sido un fracaso, al proponerse salvar a toda costa un modelo agotado de país, y no iniciar la urgente transformación social que la ciudadanía demanda”, fue la opinión del politólogo Richard Morales.

"La pandemia le ha cambiado al gobierno de Panamá, como posiblemente a todos los gobiernos, los objetivos de su gestión", señaló por su parte a la AFP Harry Brown, director del Centro Internacional de Estudios Políticos y Sociales.

Haciendo un viaje en el tiempo, hacia los meses antes del COVID-19 no encontramos con dos grandes crisis desatadas a nivel de seguridad e institucionalidad.

La conocida masacre de la Joyita y la fuga de Gilberto Ventura Ceballos empezaron a acelerar el desgaste y ponía en evidencia la falta de una política clara sobre al combate a la delincuencia. Hasta el momento se desconocen los planes del gobierno en cuanto a seguridad pública.

Lo cierto es que la fuga del dominicano asesino provocó la renuncia de Rolando Mirones y la destitución de Carlos Romero como ministro de Gobierno. Fueron cabezas que la presión ciudadana le pidió al presidente Cortizo. En ese instante no se podía perdonar la fuga del responsable de cometer los crímenes más atroces en los últimos años.

Las reformas constitucionales fue otro tema que golpeó con fuerza a Cortizo. La Asamblea Nacional integrada en su gran mayoría por diputados de su propio partido fueron los encargados de provocar la explosión social, encabezada por jóvenes que salieron a las calles a exigir una Carta Magna más justa y acorde con la realidad nacional.

Durante esta crisis el presidente Cortizo demoró en aparecer. Lo cual provocó que se empezará a cuestionar la falta de un verdadero liderazgo en el país. Algo que también se escucha en medio del combate al COVID-19.

“Temprano en la gestión, mostró una incapacidad de abordar los problemas en su raíz, al intentar imponer soluciones improvisadas desde arriba, dentro de una coalición de gobierno dividida por pugnas internas por espacios en el Estado, con el rechazo popular de las reformas constitucionales, la crisis de seguridad que condujo a la renuncia del ministro, las tempranas denuncias de corrupción, la disminución del presupuesto de educación, la ley de las APP, la deuda creciente, y la ralentización de la economía y deterioro de las condiciones de vida de la población. Una vez se desata la pandemia, terminan abandonando al pueblo”, aseguró Morales.

La crisis ha mostrado "fragilidades estructurales que eran mucho más antiguas" que el gobierno actual, dijo a la agencia AFP, Claire Nevache, investigadora asociada del Centro de Iniciativas Democráticas de Panamá (CIDEM).

Mientras que, para la diputada Rosas, “no se puede gobernar desde la base. Decir ‘gane la elección y punto’. Durante la gestión hay que hacer, construir logros y todo debe ser de cara al sol, no puede haber una nube gris sobre una parte de la Presidencia de la República”.

De Obaldía fue más directo y señaló que hay “falta de liderazgo, ineficiencia y falta de experiencia en el Gobierno”.

La reactivación económica antes del COVID-19 todavía no empezaba a tomar forma. La primera acción del equipo financiero, liderado por el Ministro de Economía y Finanzas, Héctor Alexander fue apelar a la deuda para hacerle frente a varias deudas de la administración de Juan Carlos Varela.

Vieron en la Asociación Público – Privada, una opción para empezar a realizar proyectos de infraestructura. Algo que el COVID-19 arruinó y la estrategia cambio, pero el manual de la deuda también fue utilizado. Proteger a la banca, ayudar a la pequeña y mediana empresa y apostar con todo al sector agropecuario es parte de las acciones, sin embargo, para algunos empresarios, todavía falta una política clara de reactivación económica en medio de la nueva normalidad.

“Las medidas postpandemia propuestas hasta el momento, que hacen cargar a los trabajadores con los costos de la crisis, solo profundizará aún más el colapso. Por proteger los intereses de quienes se benefician del modelo, el gobierno ha quedado atrapado, sin visión de futuro o respuestas sociales inmediatas, mientras el país se hunde a su alrededor”, es el punto de vista del politólogo Morales.

"La pandemia ha superado a Cortizo y ha dejado al desnudo la vulnerabilidad de la sociedad panameña por un sistema económico que profundiza la desigualdad", explicó a la AFP Enoch Adames, excoordinador académico de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso).

El juego de tronos en el PRD y la corrupción

El PRD es uno de los partidos más grandes del país. Las diferentes corrientes de pensamiento e intereses individuales les han costado elecciones presidenciales en el pasado. Ahora en gobierno ese juego de tronos continúa y podría estarle pasado factura a una joven administración de Gobierno.

El vicepresidente de la República y también ministro de la Presidencia, José Gabriel Carrizo es el motivo de varias diferencias.

Para De Obaldía, Carrizo aspira a tomar el control del PRD en las próximas elecciones internas del colectivo. Algo que no está dispuesto a permitir el actual secretario general, Pedro Miguel González.

“Cortizo ha cambiado 5 ministros en menos de un año. Son nombramientos que no fueron estudiados y puestos a la ligera y otras destituciones vienen producto de que algunas ministras empezaron a resentir el papel del Vicepresidente y hubo resistencia a ese liderazgo”, dijo el consultor político.

Carrizo en medio de la pandemia ha sido objetivo de varios “pailazos” que exigen su salida del Ministerio de la Presidencia. Dos viceministros han dejado sus cargos, pero Cortizo ha destacado que su Vicepresidente y el ministro Rafael Sabonge, que también ha sido cuestionado por la construcción del Hospital Modular, Panamá Solidario se mantendrán en sus cargos.

“Hay inconformidad, porque el pueblo siente que se han pedido millones y millones en su nombre, pero no les llega nada”, aseguró la diputada del CD.

"La desigualdad y las sospechas de corrupción son dos problemas viejos, no son nuevos, pero ahora con la pandemia han hecho daño a la gestión de gobierno", argumentó Brown a la agencia de noticias internacional.

¿Cambio de estrategia?

Cortizo acudirá ante la Asamblea Nacional para rendir un informe a la nación. Desde el legislativo hay voces molestas, porque los convocó a sesiones extraordinarias para atender modificaciones a la Ley de Moratoria, se aprobó el 18 de junio y hasta la fecha no la ha sancionado.

“Parece que no hay sentido de urgencia en el Ejecutivo”, destacó Rosas.

En su discurso el Jefe de Estado panameño podría estar anunciando que sanciona esta ley y otra serie de medidas para que la carga del COVID-19 sea más llevadera para los panameños.

El combate a este mortal virus y cuya estrategia está en medio de cuestionamientos, luego que fuera sacada la exministra Rosario Turner, sin que desde el Ejecutivo se dieran mayores explicaciones, es otro tema que podría abordar el Mandatario.

TVN Noticias trató a través de la Secretaría de Comunicación del Estado de obtener la versión de un funcionario que diera su punto de vista sobre el trabajo que está realizando la administración Cortizo, pero no atendieron la solicitud.

¿Será un discurso de campaña, de esperanza o de acciones concretas acordes a los tiempos que vive el país? Lo cierto es que Laurentino Cortizo sigue dentro del laberinto y aún le faltan 4 años para salir. Todavía debe seguir enfrentando el fuego causado por la pandemia y la ciudadanía sigue esperando respuestas.