Esta situación está ligada al sedentarismo, un mal que gana terreno en Panamá.

Cuando se consume alimentos y se acumula energía, entonces el sedentarismo aparece.

La ausencia de ejercicio, sumada a la mala alimentación y ofertas nutricionales engañosas, está creando niños con menos resistencia a enfermedades.

No sólo se trata de una buena alimentación, sino de saber leer el contenido de las etiquetas en los productos procesados.

Salir de la rutina es primordial para salir del sedentarismo. Quince minutos de ejercicio diarios son suficientes para mantener el buen funcionamiento.

Con información de Antony Martínez.