Ancelotti satisfecho en parte con triunfo del Real ante el Deportivo
Liga española
Real Madrid sigue tocado después del naufragio del derbi de la semana pasada. Lejos está del equipo que hiló 22 victorias consecutivas apenas hace unos meses y sigue sin mostrar mejoría en su juego.
El conjunto merengue apenas hizo lo mínimo para vencer por 2-0 al Deportivo la Coruña, un equipo en lucha perene por la permanencia. Fallos inocentes de cara a gol; errores defensivos en la central que no se vieron reflejados en el marcador gracias a un par de atajadas de Iker Casillas a los disparos de Cuenca y Oriol Riera.
El equipo que dirige Carlo Ancelotti sobrevivió esta vez con una genialidad y un golpe de suerte. El técnico, que lo sabe, no puede más que mostrarse aliviado porque pudo salvar los muebles y confiar en que el bajón en el rendimiento de su equipo se deba al estado anímico producto de una "semana particular".
"No fue un partido fácil. Creo que lo hemos jugado solamente en parte bien. Tuvimos dificultad, pero fue el momento. Fue una semana particular, complicada. La victoria es buena para mejorar nuestra... Para volver a hacer lo que hemos hecho siempre; hoy lo hicimos en parte", señaló Ancelotti en rueda de prensa en el estadio Santiago Bernabéu.
Real Madrid atraviesa el momento más difícil de la campaña, algo que fue puesto en evidencia en el derbi madrileño y que su afición no ha perdonado del todo, pese a la victoria.
Bale, Benzema, Casillas y el propio Ancelotti fueron recibidos con silbidos apenas se anunciaron sus nombres en la megafonía. Cristiano Ronaldo, el gran estandarte de la afición merengue, se llevó su dosis de recriminaciones durante el encuentro de tantas veces que falló de cara a gol. Iker, quien lleva dos años polarizando a la afición, fue silbado incluso cuando atajó bien. Aunque líder en la Liga, la grada no está para soportar un error más que ponga en riesgo el ansiado título; una actitud que ha caracterizado al Bernabéu durante años y que, quien quiera mantenerse en el barco, debe asimilar. De ahí que el técnico italiano, consciente de que la victoria apenas sirve de placebo, quiso aligerar el ambiente mostrándose comprensivo con los reclamos.
"Es normal (la rechifla). Es frustrante perder un derbi 4-0; para la afición y nosotros. Lo que sale de este partido es que todos lo hemos comprendido. El apoyo de la afición es importante en este momento. Es complicado ayudar al equipo cuando las cosa está complicada y el equipo lo agradece", señaló.
Ancelotti prefirió destacar el hecho de que, tras el segundo gol, la grada del Bernabéu se mostró ligeramente más tranquila e incluso despidió con aplausos a Benzema e Isco, los goleadores de la noche. Sobre todo al último, cuya participación en el juego resultó clave en la victoria. Isco acertó de cara a gol en su único disparo, entregó 65 pases con 81% de acierto, uno de ellos en jugada clave, fue el jugador que sumó el mayor número de pases filtrados, mientras en labor defensiva recuperó dos balones y dos entradas exitosas.
Y aunque el Real Madrid salvó el día en gran parte gracias a Isco, Ancelotti no considera que sea "el jugador que lleva el peso del equipo". Quizás en un intento por subsanar las intensas críticas a determinados jugadores, insistió en que Isco "trabajó igual que el resto" y defendió, sobre todo, a Gareth Bale, quien consciente de que sería mirado con lupa hizo un esfuerzo monumental para involucrarse incluso en defensa con dos despejes y un balón robado al tiempo que intentó marcar con hasta cuatro disparos a puerta y completó 38 pases, cuatro servicios incluidos.
"El trabajo de Bale fue muy bueno. Trabajó en defensa muy bien. Su trabajo fue como el de Isco. Hemos defendido con dos líneas de cuatro y siempre hemos jugado así", destacó el técnico merengue.
Ain así, el Real Madrid todavía está muy lejos de ser el que hace seis meses venció por 2-8 al mismo rival al que esta noche sólo pudo hacer daño en dos ocasiones. Los ocho tantos en nueve disparos contrastan con los dos tantos que marcaron hoy pese a los 17 intentos de cara a gol, seis de ellos a puerta. Al conjunto merengue le pesan las ausencias en defensa y la falta de pólvora de sus delanteros y se le nota.
Eso sí, la mala racha terminará eventualmente y, cuando eso suceda, no habrá quien los pare, de acuerdo con el técnico del Deportivo La Coruña, Víctor Fernández, casi aliviado de haberse llevado solo dos tantos en contra pues su lucha, la de la permanencia, está en otro lado.
"Su plantilla es de las mejores pero luego hay jugadores que son el 'plus del plus'. Al Madrid le ha faltado algunos, como Sergio Ramos, que juega en ambas áreas, en largo y en corto y eso lo tiene que acusar. Cristiano Ronaldo no está como hace cuatro meses, pero recuperará su tono y entonces el rival que se dé por fastidiado. En cualquier caso, no fue el partido de Riazor, donde tiraron nueve veces e hicieron ocho goles", aseveró.