El Barça de Luis Enrique muy a lo NBA

En los últimos años, el Barcelona ha sufrido como nadie con las jugadas a balón parado. En cada saque de esquina o falta lateral, el peligro se ceñía sobre el portal azulgrana y cuando eran a favor las posibilidad de que acabaran en gol eran mínimas. Así se pasaron varios años. La principal excusa era que los jugadores eran bajitos, un hecho irrefutable. Pero había más. No se defendía bien la zona y en ataque los movimientos eran simples. Guardiola intentó trabajar este aspecto, pero apenas dedicaba unos minutos en un entrenamiento a la semana.

Luis Enrique, de la mano de Unzue que es el responsable de este área, se lo tomó muy en serio. Desde el primer día dedicó muchos minutos a entrenar cómo se defienden esas jugadas y cómo se atacan. El resultado es extraordinario. Desde el Clásico del Bernabéu el Barcelona no encaja un gol de esta manera y, en cambio, en las últimas semanas se está hinchando a marcar goles.

Bloqueos y aclarados Luis Enrique ha aplicado movimientos y estrategia del baloncesto para conseguir superar al rival. Bloqueos, aclarados o el factor sorpresa se suceden en los córners y en las faltas laterales. "Los bloqueos no son exactamente como en baloncesto porque se pitaría siempre falta, son más bien un arrastre de los defensas hacia el lugar que quieres. Conceptualmente sí se aplican estos conceptos del baloncesto, pero adaptados a este deporte", dice Toño Llorente, ex baloncestista y un buen amigo de Luis Enrique, aunque asegura que con él nunca ha hablado de este tema.

El gol de Messi frente al Eibar tuvo todos los ingredientes baloncestísticos aplicados al fútbol. Bartra y Piqué hicieron dos pantallas a los defensores del Eibar y se los llevaron hacia su portería. El objetivo era hacer una aclarado en el punto de penalti para que llegara un compañero.

Aquí es cuando aparece otro aspecto que se utiliza mucho en el baloncesto que es el factor sorpresa. Porque el jugador que llega para rematar es Leo Messi, el más bajito. El fin de semana pasado fue Alba el que acudió al remate. Esto no se lo esperaban los rivales. "Es una táctica muy de basket. Cuando te tienes que jugar un triple sobre la bocina, hay veces que eliges al pívot para que lo haga en vez del buen lanzador. Porque a veces es preferible que ese `5´ se tire el triple solo que, por ejemplo, Navarro con un defensor colgado del brazo", explica Llorente.

El factor sorpresa En este caso la incursión hacia el centro del área de Messi y Alba pilló por sorpresa a los defensores de Eibar y Rayo y ambas acciones acabaron en gol. El remate de Leo fue directo, mientras que Piqué aprovecho el rechace.

"Es el concepto de aclarado del baloncesto. Tú dejas libre la zona en la que quieres poner el balón para que allí resuelva tu jugador. En la NBA se utilizaba mucho en los pivots. Existía una regla que era la defensa ilegal por la cual no se podía hacer un dos contra uno en defensa. En basket todos los jugadores se iban de la zona y se metía el balón al pivot para que se jugase un uno contra uno". Es el símil que explica Llorente y que en el fútbol el Barcelona lo ha hecho con esos aclarados a Messi, Alba o Piqué.

En Can Barça todos admiten con orgullo que trabajan a fondo este tema. "Nos salió exactamente como estaba planeada la jugada", decía Bartra. "El equipo ahora está convencido de que podemos hacer daño a balón parado", avisa Luis Enrique.