Guardiola: El Barsa estará bien con Vilanova
Pep Guardiola no estaba de humor para la nostalgia antes de su último partido al timón del Barcelona, al tiempo que eludió las preguntas en torno a una presunta mala relación con su presidente y defendió la decisión del equipo de reemplazarlo con Tito Vilanova. La final de la Copa del Rey el viernes ante el Athletic de Bilbao le da a Guardiola la oportunidad de llevarse un 14to trofeo para poner fin a uno de los períodos más exitosos de un entrenador con un equipo. El técnico también ayudó a que su oncena se colocara posiblemente como una de las mejores en la historia del fútbol. Pero en lugar de una tarde tranquila al concluir su gestión, Guardiola pareció mostrar cierta tensión ante los comentarios sobre su salida, entre ellos uno del ex astro holandés Johan Cruyff, quien también militó en el Barsa. Guardiola, de 41 años, dijo que el nombramiento de Vilanova nunca fue una sorpresa y que su asistente y amigo de hace tiempo se desempeñará muy bien una vez que asuma el puesto. "He oído que Pep tiene que dar explicaciones sobre la relación con Tito", afirmó el jueves en una conferencia de prensa en el Camp Nou. "En noviembre me dijo Zubi (Andoni Zubizarreta, director deportivo del Barsa) que qué me parecía que Tito fuera el entrenador. El día del Chelsea cogí a Tito y se lo dije "ha llegado tu momento. Creo que te ofrecerán ser el técnico". Yo le dije "haz lo que te parezca""". "No le puedo decir otra cosa a una persona que me ha ayudado a ser el entrenador que soy", agregó. "¿Quién soy yo para decirle que no puede hacerlo? Lo que decidas tendrás mi apoyo", le dijo a Vilanova. "Este es mi último servicio, Tito lo hará bien. Tito recibe su propia herencia". Explicó que la idea surgió por primera vez en noviembre antes de que la eliminación del Barsa ante el Chelsea en la Liga de Campeones lo llevara a impulsar a Vilanova al puesto de técnico. Después de la derrota ante el club inglés, recordó Guardiola, convocó a Vilanova a su oficina y le dijo que no tenía la fuerza necesaria para continuar. Guardiola espera que Vilanova se desempeñe bien, a pesar de que Cruyff consideró que la partida del técnico cierra una etapa y hay que aguardar a ver qué depara el futuro. "Con Guardiola termina un ciclo, porque era él quien tenía ahora todo el mando", dijo Cruyff en una entrevista el jueves con El Periódico, y añadió que ahora habrá que ver cómo se desempeñan los blaugrana con Vilanova al frente. Guardiola dijo que no lamenta nada durante el tiempo que estuvo al timón del club. Los únicos contratiempos serios fueron los problemas de salud de Eric Abidal y de Vilanova, así como la derrota ante el Chelsea el mes pasado. El entrenador se veía tenso al comenzar la conferencia de prensa en momentos en que se sigue cuestionando su relación con el presidente Sandro Rosell como una posible causa que podría haber contribuido a su salida. Los problemas de hace tiempo de Rosell con su predecesor Joan Laporta, que contrató a Guardiola como técnico del equipo B en 2007 antes de promoverlo al equipo grande un año después, presuntamente están detrás de su partida. "A los dos presidentes les estoy tremendamente agradecido. He tenido una maravillosa relación con ambos y a los dos les digo que me voy, que doy un paso al lado. Cuando el club me necesite aquí estaré, pero que no usen mi nombre para esto", respondió Guardiola cuando se le preguntó si prefería a uno de los dos.