José Mourinho es "blanco" de críticas

La expresión de desconcierto del presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, tras escuchar que el veterano portero Iker Casillas había sido descartado para el partido del sábado ante el Málaga evidenció qué tan lejos ha llegado el técnico José Mourinho en su búsqueda por ejercer el control del club. Y podría ser que Mourinho finalmente haya ido demasiado lejos. Tras la oleada de críticas de seguidores y jugadores desatada por la derrota 3-2 del Real Madrid en ese encuentro, surge la pregunta sobre si Pérez ha alcanzado el límite de su apoyo al portugués, un entrenador tan exitoso como mordaz. "Mourinho lleva sus relaciones con la plantilla de una manera particular", dijo Jorge Valdano, ex jugador y ex técnico del Real Madrid. "Pero esto es doblar la apuesta. Es una exhibición de poder, es imponer su decisión a una leyenda del club". No fue sino hasta minutos antes del cotejo que Mourinho anunció su decisión de suplir a Casillas —un arquero muy respetado tanto en España como en el extranjero por una década de excelencia en la portería del Madrid— con Adán Garrido, quien ha visto poca acción. La decisión resultó contraproducente en el segundo tiempo, cuando el Málaga anotó tres goles al inexperto Garrido para propinar al Madrid otra derrota, que lo coloca 16 puntos detrás del líder del torneo, el Barcelona, y destroza sus esperanzas de defender el título de la liga española. Mourinho explicó que optó por Garrido porque se encontraba "en mejor forma" que Casillas. Tal argumento no logró convencer a aficionados y jugadores, previos y actuales. Una encuesta entre los aficionados publicada el lunes por el diario deportivo español Marca indicó que la mayoría de los seguidores del Madrid desea la salida de Mourinho. El 82% de los más de 100.000 participantes en la encuesta en internet votó a favor del cese del portugués ante la pregunta: "¿Debe el Real Madrid destituir a Mourinho?" Sergio Ramos, defensa del equipo, dijo después del partido que estaba "sorprendido" por la decisión. Casillas dijo el domingo a la cadena de televisión española La Sexta que se sentía bien y que Mourinho no le explicó por qué lo dejó en la banca. "No estoy acostumbrado a ser suplente", dijo Casillas. "Pero por encima de cualquier jugador está el equipo. Lo que hay que hacer es seguir entrenando e intentar recuperar la titularidad". Desde su llegada al Real Madrid hace tres temporadas, Mourinho ha ganado un título de la liga española en 2012 y la Copa del Rey un año antes. Casillas, el capitán del Madrid y de la selección española campeona del mundo y bicampeona de la Eurocopa, siempre ha sido considerado como intocable. El portero de 31 años es el más respetado integrante de la plantilla actual del Real Madrid. Muchos hinchas lo ven como el único enlace entre los días de gloria de los "Galácticos" de David Beckham, Ronaldo y Zinedine Zidane, y la previa era dorada de los delanteros Raúl González y Vicente del Bosque, el máximo técnico "caballero" del club.