Napoleón vuelve a Versalles por un fin de semana

Los granaderos de la Guardia Imperial gritan "¡Viva el Emperador!" al paso de Napoleón y su cuñado, el príncipe Murat, en el patio de armas del Gran Trianón, en el recinto del castillo de Versalles, donde 350 personas recrearon esa época durante un fin de semana.

En este lugar cercano a París se encuentra la finca del Trianón, que Napoleón había destinado a su residencia.

La recreación fue una iniciativa de Laurent Brunner, director del espectáculo del castillo de Versalles, con motivo del bicentenario de la muerte del emperador francés.

Los 7.000 visitantes tuvieron mucho donde elegir entre demostraciones de manejo de armas, de caballería o de cañonazos.

La mayoría de espectadores, con sus familias y algunos con cochecitos de bebé, asistieron a una demostración con armas frente al Trianón, a cargo de un centenar de soldados de infantería y una veintena de soldados de caballería.

Luego siguieron a las tropas de vuelta al lugar de su acampada, en la llanura bajo el castillo. Allí, los soldados y el público vieron a las "vivandières", las mujeres que se ocupaban de la intendencia, calentado sopa mientras los hombres se sacaban los uniformes

Más adelante, un médico explica, con la ayuda de instrumentos de época, cómo se practicaba la medicina en los campos de batalla napoleónicos.

Mientras tanto, el príncipe Murat --en realidad un empresario-- aparece con sombrero de plumas y recibe a su personal para almorzar en su tienda.

Patrice, de 52 años, bombero en la vida civil, se puso el uniforme del general Belliard, jefe del Estado Mayor del príncipe Murat.

"Es el mayor y más bello acontecimiento del año del bicentenario de Napoleón. Yo era soldado raso cuando empecé hace 25 años, y fui ascendiendo en la jerarquía hasta llegar a ser hoy general. He conservado todos mis uniformes, incluido el primero, que hice con mis propias manos", dice.

El Emperador aparece después de la comida y una señora le pregunta "¿Podemos tomarnos un selfie?". Todo el mundo quiere una foto de recuerdo con Olivier, un actor que se metió en la piel de Napoleón por un fin de semana.