Migrantes piden mayor protección tras su paso por Panamá

Los migrantes irregulares que están de paso por Panamá y que tienen como destino llegar a los Estados Unidos cruzando las fronteras centroamericanas, están solicitando a los gobiernos de estas zonas mayor protección y vigilancia, para que no se den violaciones a sus derechos humanos.

La mayoría de estos migrantes que llegan a Paso Canoas aseguran que se han enfrentado no solo a hurtos y robos, sino también a otras vulneraciones como trato denigrante, vejaciones y abusos físicos y sexuales. Además, sostienen que se les está haciendo un cobro excesivo para ser trasladados a la frontera.

Algunos de los migrantes que ya han pasado por esta travesía señalan que en países centroamericanos como Nicaragua, El Salvador y Honduras al igual que en México se están dando algunas otras situaciones que ponen en riesgo su seguridad, por lo que están haciendo el llamado a los gobiernos de estos países para que refuercen los operativos de vigilancia y protección ya que ellos solo se encuentran de tránsito, toda vez que su objetivo es llegar a Estados Unidos.

El Ministro de Seguridad, Juan Manuel Pino, informó que en lo que va de 2023, más de 150 mil migrantes han cruzado a pie la peligrosa selva del Darién, siete veces más que las que llegaron en el mismo periodo de 2022. Las autoridades estiman que, de continuar la tendencia, el año 2023 podría cerrar con el cruce de más de 400,000 personas.

La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) señalan que Panamá enfrenta una de las crisis de movimientos mixtos más desafiantes de la última década, como parte de un desplazamiento sin precedentes a través de las Américas. Luego de que 2022 fuese un año récord, en el que cerca de 250.000 personas refugiadas y migrantes arriesgaron sus vidas atravesando el Darién en busca de protección y mejores oportunidades, el primer trimestre de 2023 apunta a un aumento en el tránsito de personas por esta vía.