Los socorristas que regresaron a visitar a un viejo amigo y a cinco niños huérfanos

Los camisas roja tienen muchas historias que contar, pues todos los días es una experiencia nueva a la que se deben enfrentar. Una vida llena de sacrificios y entrega desinteresada es parte de su rutina, sin embargo en ocasiones hacen un alto para recordar viejos amigos y prestar ayuda más allá de su deber.

Un ejemplo claro de lealtad y amistad se vivió el pasado 29 de diciembre, cuando personal del Cuerpo de Bomberos de Veraguas decidió visitar a un viejo amigo y fundador de la estación de bomberos de esta provincia.

Los bomberos tomaron sus equipos rodantes y acudieron a saludar al Subteniente Humberto Hernández, conocido cariñosamente como “Neñe” en el poblado de Sabaneta de la Peña en Santa Fé de Veraguas.

La visita fue propicia para hacerle entrega a esta unidad, que prestó servicio en la antigua Guardia Permanente, de mercancía seca y víveres. Muchas anécdotas e historias también se contaron durante esta visita entre compañeros.

Un llamado más allá del deber

La noche del 23 de diciembre de 2016, los bomberos de Penonomé acudieron al llamado de auxilio de una mujer de 34 años, quien falleció y dejó en la orfandad a cinco niños.

La estación regional de Penonomé a cargo del Coronel Roderick Salcedo, regresó al lugar de la tragedia y se encontraron con los cinco pequeños, para en medio de la tristeza por la pérdida de su madre llevarles un poco de alegría.