Joel Embiid: ¿En qué consiste la parálisis de Bell que afecta al jugador camerunés?

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Joel Embiid estrella de los Philadelphia 76ers
Joel Embiid estrella de los Philadelphia 76ers / AFP

Luego del triunfo de los Philadelphia 76ers sobre New York Knicks 125-114 juego 3 de los playoffs de la NBA, Joel Embiid figura clave de los Sixers, hizo un anuncio en conferencia de prensa sobre su estado de salud.

Resulta que Joel Embiid padece de parálisis de Bell: "Sí, es bastante molesto. Mi lado izquierdo de mi cara, mi boca y mi ojo. Ha sido duro".

"Voy a seguir luchando contra cualquier cosa. Es lamentable, así es como lo veo. Pero no es una excusa".

Conoce más sobre la parálisis de Bell.

La parálisis de Bell es una condición médica que afecta los nervios faciales, causando debilidad o parálisis repentina en los músculos de un lado de la cara. Esta afección es generalmente temporal y se desarrolla cuando el nervio facial, que controla los músculos faciales, se inflama o se comprime. Aunque la causa exacta de la parálisis de Bell aún no se comprende completamente, se cree que factores como infecciones virales, inflamación, estrés o trastornos autoinmunes pueden desencadenarla.

Los síntomas de la parálisis de Bell suelen aparecer de manera abrupta y pueden incluir debilidad facial, dificultad para cerrar un ojo o sonreír, pérdida del gusto, excesiva producción de saliva o lagrimeo involuntario en el ojo afectado. Aunque la parálisis de Bell puede ser preocupante, en la mayoría de los casos, los síntomas mejoran gradualmente durante varias semanas o meses, y la recuperación completa es común.

El tratamiento de la parálisis de Bell puede implicar el uso de corticosteroides para reducir la inflamación, fisioterapia para mantener la función muscular y proteger los ojos, así como medidas para controlar los síntomas asociados, como el lagrimeo excesivo o la sequedad ocular. En casos raros, pueden ser necesarios otros enfoques terapéuticos, como cirugía para aliviar la presión sobre el nervio facial. Si bien la parálisis de Bell puede ser angustiante, la mayoría de las personas se recuperan por completo con el tiempo y experimentan una restauración completa de la función facial. Sin embargo, es importante buscar atención médica adecuada para recibir un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado.

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