Los 'gurises' de Tabárez prometen un mediocampo creativo en Uruguay

Una nueva generación aspira a tomar el control del mediocampo de la selección uruguaya en Rusia-2018 e imponer a fuerza de talento respeto por el balón, sin renunciar al juego aguerrido que mantiene vivo el fuego sagrado de la Celeste.

Uruguay lo volvió a hacer y en la Copa del Mundo mostrará los frutos de la inagotable cantera de futbolistas que mantiene al país de 3,3 millones de habitantes en la élite. El mediocampo refleja la renovación con veinteañeros como Rodrigo Bentancur, Nahitan Nández, Lucas Torreira, Matías Vecino, Giorgian De Arrascaeta y Diego Laxalt.

"Uruguay estaba acostumbrado a mucha marca y siempre a alguna contra y no generar tanto fútbol. Hoy el fútbol a nivel general ha cambiado mucho y la demostración está en los grandes jugadores de buen manejo", que se han sumado al equipo, comentó Luis Suárez días atrás.

En Sudáfrica-2010 y Brasil-2014 los volantes de marca férrea como Egidio Arévalo Ríos o Diego 'Ruso' Pérez se ganaban los aplausos de una afición que históricamente celebró la 'garra' (temperamento) de su equipo, pero en los últimos partidos de la clasificatoria sudamericana comenzó a disfrutar de pinceladas de talento y control de balón en su mediocampo.

Para Oscar Tabárez es injusto comparar diferentes épocas de su selección, pero admite que el proceso de trabajo que hace doce años lidera en Uruguay tiene en el plantel que llevará a Rusia variantes que no tenía años atrás.

"Vamos a llevar un equipo que dé un espectro de posibilidades para su integración, para solucionar problemas, más amplio que en otras oportunidades. Esa es la expectativas que tenemos", auguró el 'Maestro', siempre renuente a hablar en público sobre las fortalezas y puntos débiles de sus dirigidos.

Una selección de mediocampista que mantiene al volante de Peñarol Cristian Rodríguez y suma al experimentado Carlos Sánchez, jugador de la liga mexicana que hará su debut mundialista.

- Sin equilibrio no hay paraíso -

El renovado mediocampo charrúa mostró pinceladas de su talento en la despedida ante Uzbekistán el jueves en un estadio Centenario repleto que gritó un gol de De Arrascaeta, jugador del Cruzeiro de Brasil.

A ellos se sumaron Vecino, que provocó la falta que acabó con el gol de Suárez en una despedida que terminó 3-0. Bentancur (Juventus) con vistosos pases y Lucas Torreira que entró para aportar dinamismo fueron otros puntos altos de los últimos movimientos competitivos del equipo antes del debut contra Egipto.

"Lo importante es mantener el equilibro queremos siempre dar opciones de pase, ser verticales y buscar a nuestros delantero que son importantes porque si los encontramos seguro vamos a tener gol", dijo Torreira al finalizar el amistoso.

El volante del Sampdoria italiano – hábil para la marca y salir con pases precisos en ataque- debutó con la selección uruguaya en marzo en la China Cup y al igual que 'Pato' Sánchez y el delantero Maximiliano Gómez (Celta/España) no había disputado ningún mundial juvenil ni mayor con el seleccionado campeón del mundo en los lejanos 1930 y 1950.

El discurso de Torreira coincide con la máxima de su veterano entrenador, el mayor de los estrategas que disputarán el Mundial con 71 años, dispuesto a dar luz verde al talento joven, pero sin desdibujar la elogiada defensa de su equipo.

Detrás del sector medio, una férrea defensa liderada por el capitán Diego Godín pretenderá cerrar el arco de Fernando Muslera. Mientas que en ataque la fórmula es la misma de los últimos años con Luis Suárez y Edinson Cavani.

La dupla de oro del ataque uruguayo liderará al equipo que debutará en el Grupo A el 15 de junio ante Egipto, cinco días después irá ante Arabia Saudita y el 25 cerrará su participación en la serie ante Rusia.

AFP.