Pia Sundhage mira a Brasil con opciones de ganar el Mundial

Si Brasil ha apostado para su futuro próximo por un entrenador extranjero para su equipo masculino, el italiano Carlo Ancelotti, la selección femenina del país ya dio ese paso en 2019, con la llegada de la sueca Pia Sundhage a su banquillo.

La experimentada entrenadora ha logrado grandes éxitos colectivos e individuales en su larga carrera, pero el Mundial es su principal asignatura pendiente, ya que nunca pudo ganarlo, ni como jugadora ni dirigiendo desde el banquillo.

Sundhage, que tiene ahora 63 años, asumió su cargo actual después de que Brasil cayera en octavos de final en el Mundial de Francia-2019, por lo que afronta ahora en la cita de Australia y Nueva Zelanda, donde sus pupilas debutan el lunes contra Panamá en Adelaida, su primera Copa del Mundo con la 'canarinha'.

"Renovamos el equipo y creo que tenemos opciones de ganar el Mundial", confió Sundhage antes de afrontar este reto en Oceanía.

No le falta experiencia en el fútbol internacional ni en grandes competiciones.

Ya como jugadora tuvo una carrera destacada hasta su retirada después de los Juegos Olímpicos de Atlanta-1996, aunque en una época en la que el fútbol femenino no tenía la proyección mediática y el impacto que ha ido ganando en los últimos años.

Con Suecia jugó 146 partidos, firmando 71 goles, y formó parte del plantel ganador de la Eurocopa en 1984. En el Mundial, quedó tercera con su país en 1991 y fue cuartofinalista en 1995.

Ha sido ya como entrenadora cuando ha conseguido sus mayores éxitos.

Empezó en esas labores en clubes de Suecia, Estados Unidos y Noruega, hasta que dio el salto a las selecciones nacionales.

Fue en 2007, cuando aceptó ser ayudante de su compatriota Marika Domanski-Lyfors en la selección china, que era anfitriona del Mundial ese año. El gigante asiático tuvo una actuación honrosa, llegando a cuartos de final.

- La desilusión de Fráncfort -

En noviembre de ese 2007 fue designada seleccionadora de Estados Unidos, abriendo entonces una etapa de cinco años que le dieron las mayores alegrías de su carrera, especialmente con la conquista de dos oros olímpicos, los de Pekín-2008 y Londres-2012. Ese último le permitió además meses después ser premiada por la FIFA como mejor entrenadora de fútbol femenino del año.

La mancha de esa etapa con el 'Team USA' fue no haber ganado el Mundial de Alemania-2011, donde partían como favoritas. Se quedaron con la miel en los labios: Japón les sorprendió en aquella final en Fráncfort.

Días antes, en los cuartos de final en Dresde, los Estados Unidos de Sundhage habían eliminado a Brasil (5-3 en los penales tras un empate 2-2). Los dos tantos brasileños en el tiempo reglamentario fueron firmados por la mítica Marta, que forma parte ahora, a sus 37 años, de la aventura verdeamarilla en este Mundial-2023.

Como seleccionadora de Suecia, entre 2012 y 2017, fue tercera en la Eurocopa de 2013 y plata en los Juegos Olímpicos de Rio-2016. En el Mundial de Canadá-2015, las escandinavas fueron goleadas por Alemania en octavos de final.

Brasil y Sundhage unieron sus caminos en 2019.

Los Juegos Olímpicos de Tokio trajeron una decepción en 2021 con la eliminación ante Canadá en cuartos de final, pero un año después el país conquistó la Copa América, lo que disparó la ilusión de cara al Mundial.

"Tenemos jugadoras que soñaron con este momento y jugadoras experimentados que ayudarán en este proceso. Es un momento muy especial, después de cuatro años de ir al Mundial y hacer realidad los sueños de estas deportistas", se ilusionó Sundhage cuando dio a conocer la lista de convocadas para viajar a Oceanía.

Si el 20 de agosto Brasil levanta el trofeo del Mundial habrá hecho historia con su primer título en este torneo. Sundhage se habrá sacado una vieja espina clavada y habrá agrandado todavía más su leyenda en el fútbol femenino.