Ciro Immobile, la mejor muestra de la bipolaridad

Curioso caso el de este Borussia Dortmund de Jurgen Klopp que está teniendo un inicio de campaña de lo más surrealista. Sumido en el fondo de la clasificación de la Bundesliga donde comparte último puesto junto al Werder Bremen, ya se ha clasificado de manera impecable para los octavos de final de la Champions League. Y si se utiliza la palabra impecable para calificar los cuatro partidos del Dortmund en Copa de Europa, no se hace en balde. Tras ganarle al Galatasaray cuatro a uno este pasado martes, los alemanes encajaron su primer gol en esta competición. Después de cuatro encuentros, el conjunto de Klopp ha conseguido otras tantas victorias tras doblegar en casa al Arsenal y a los turcos, y conquistar los campos de Anderlech y el Türk Telekom Arena. Algo que contrasta con su pobre bagaje en la competición doméstica, donde sólo han podido vencer dos partidos y empatar uno. A pesar de las muestras de mejoría mostradas frente al Bayern, el Borussia perdió en los últimos minutos merced a un gol de Robben. Pero si hay un jugador que ejemplifica de manera exacta esta teoría bipolar es el delantero italiano Ciro Immobile. El napolitano, que llegó este año para suplir la baja de Lewandowsky, ha alternado actuaciones excepcionales en Champions con otras mucho más discretas en Liga. El ex del Torino ha disputado tres encuentros en Liga de Campeones y en los tres ha mojado. Arsenal, Anderlecht y Galatasaray han sido sus víctimas. Immobile ayudó, y mucho, con sus goles y sus continuos desmarques para que los phosphorite pudiesen desplegar mejor su juego. Números muy diferentes a los obtenidos en Bundesliga por un Ciro Immobile que sólo ha podido besar las mallas en dos ocasiones después de disputar ocho partidos. Sus discretas actuaciones en Liga le han llevado a recibir las primeras críticas, pero al igual que el resto de su equipo siempre se redime en Europa. Lo que está claro es que el Borussia necesita al mejor Immobile para poder levantarse en liga y hacer algo importante. Pues como se puede observar, los goles del italiano son sinónimo de puntos.