Siete años de la extraña desaparición de dos jóvenes europeas en Chiriquí

Eran los primeros días de abril de 2014, cuando se conocía de la desaparición en un sendero entre las cordilleras de Chiriquí y Bocas del Toro de las holandesas Kris Kremers y Lisanne Froon, con causas y circunstancias que hasta la fecha se desconocen.

Fue el 2 de abril de 2014, cuando uno de los guías de turismo que las debía acompañar a un viaje de aventura por el sendero El Pianista, reportó que no habían llegado a la cita y que tenían varios días de no saber de ellas, se encendieron las alarmas y los operativos de búsquedas.

El sendero El Pianista es un área selvática, de clima húmedo y donde incluso hay felinos, que conecta zonas de la provincia de Chiriquí con Bocas del Toro.

Semanas después de su desaparición, se encontraron algunas de sus pertenencias y restos óseos. En ese momento el Ministerio Público empezó a investigar. Un año después, se solicitó el archivo provisional del expediente y solo será reabierto si se presentan nuevas pruebas.

Esta desaparición mantuvo intrigados a los vecinos y visitantes del distrito de Boquete, en Chiriquí, a donde llegaron las holandesas a finales de marzo de 2014, con la intención de aprender español y hacer trabajo social.

Lisanne Froon y Kris Kremers, tenían 22 y 21 años, respectivamente, al momento de su desaparición hace 7 años.

Las investigaciones

En su momento, la fiscal responsable de la investigación, Betzaida Pitti, confirmó que uno de los hallazgos pertenecía a Lisanne Froon, después de haber hecho las primeras y pertinentes comprobaciones de ADN.

Otra segunda ronda de pruebas forenses confirmó el descubrimiento de ADN de Kris Kremers, entre los restos humanos hallados.

Fue en el área del río Culubré donde residentes hallaron una mochila con los teléfonos celulares, una cámara fotográfica, anteojos, ropa interior de las jóvenes holandesas, además del pasaporte de Lisanne y 83 dólares en efectivo, según reposa en la información judicial.

El fragmento óseo, cuyo material genético ha coincidido con las muestras de ADN enviadas desde Holanda por los padres de Lisanne, correspondía a parte de un pie.

Hubo un ofrecimiento de una recompensa de varios miles de dólares por parte de la familia de las holandesas, que además trajo a un grupo de socorristas y perros entrenados que se fueron sin ningún resultado, hasta falsas alarmas sobre hallazgos de restos humanos rodearon este caso.

En las redes sociales, también se formularon tesis de un supuesto caso de trata de personas y hasta se insinuó la supuesta implicación de otros dos jóvenes, en principio identificados como costarricenses, pero que resultaron ser holandeses, quienes aparecieron con las jóvenes en fotos tomadas antes de la desaparición y colgadas en la página de Facebook de ellas.

En una asistencia judicial pedida a Holanda, Panamá da los nombres de ambos jóvenes y las autoridades holandesas les tomaron declaraciones, en las que afirmaron que estuvieron con Lisanne y Kris en Bocas del Toro, pero que luego regresaron a Holanda.

Sendero no turístico

El sendero El Pianista no era un camino para realizar ecoturismo, así lo explicaron las autoridades de la provincia.

“Es un camino rural para las personas que viven en el límite con Bocas del Toro”, así lo indicó en su momento el Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc).

“Debido a este suceso se han buscado muchos correctivos. Falta mucho que lograr, pero se demostraron las debilidades del distrito de Boquete al nivel institucional y de autoridades locales”, explicó el alcalde de Boquete para esa época, Emilio Walker.

El Ministerio de Ambiente en Chiriquí, después del caso de las holandesas, implementó más planes de supervisión por guardaparques en Boquete y otras áreas de la provincia.

Dolor familiar

El 25 de junio de 2014, los familiares de Kris Kremers admitieron la muerte de ambas jóvenes holandesas en un comunicado difundido.

"La familia de Kris Kremers ha tenido que enfrentarse a la dura noticia de que al parecer e igualmente que Lisanne, también Kris falleció durante su viaje a Panamá", se indica en la nota, fechada en la ciudad holandesa de Amersfoort y entregada a los medios de Panamá.

Es un capítulo muy oscuro en el que aún quedan muchas preguntas que ensombrecen el fatal desenlace de Kris y Lisanne. Sólo hay una forma de encontrar respuestas para esta familia: continuar la búsqueda", se señala en el comunicado emitido por la familia Kremers.

En enero de 2015 se realizó una nueva búsqueda, la cual fue calificada como complicada y peligrosa por el vocero de los especialistas en rescate canino, Gerome Van Pasell, quien dirigió la última expedición que efectuaron los guías y rescatistas de Holanda que visitaron la zona de Alto Romero y el río Culubré, en búsqueda de nuevos restos óseos de Lisanne y Kris.

Este intento fue fallido y no se pudo ubicar nuevos restos óseos de las holandesas, así como de pistas que certificaran las causas de la muerte de las dos europeas.