Rembrandt y Velázquez, el duelo de artistas más esperado de Ámsterdam

Los dos grandes maestros del siglo XVII, Velázquez y Rembrandt, lideran un cara a cara artístico entre España y Holanda en el Rijksmuseum de Ámsterdam para rememorar las tensiones políticas entre ambos países durante esa época.

La exposición es "muy especial" porque se juntan en un mismo espacio obras del siglo XVII españolas y holandesas, algo que no había ocurrido antes en este país, recuerda a Efe la comisaria asistente del Rijksmuseum, Cèlia Querol Torrelló, que participó en la organización de esta muestra, que abrirá al público el próximo viernes y será inaugurada un día antes por los reyes Felipe VI y Guillermo Alejandro.

El RIjksmuseum presenta más de 60 obras de Rembrandt, Velázquez, Murillo, Vermeer, Zurbarán, Frans Hals y Ribera, y las muestra de dos en dos, a veces de tres, con la idea de crear un diálogo visual y una confrontación sobre la realidad, la eternidad, la religión, la belleza, la riqueza, el poder y el amor, que todos esos artistas intentaron mostrar en sus pinturas.

"Se trata de ver cómo dialogan estas obras, para inspirar un poco al público y que pueda reflexionar sobre la pintura española y holandesa de ese siglo. Es una exposición muy conceptual, bastante abstracta pero también muy emotiva. No es necesario entender las obras, el contexto, o saber del pintor, para sentir o tener una impresión de las pinturas", añade Querol.

El siglo XVII se recuerda en los Países Bajos como aquel de tensiones políticas con la España de Felipe II, de la que los holandeses se independizaron después de la guerra de los Ochenta Años (1568-1648), protagonizada, cuentan los holandeses, por la falta de delicadeza del duque de Alba y el rechazo de la nobleza calvinista al catolicismo español.

Aunque en lo político destacaran principalmente las diferencias, ambos países estaban viviendo en esa época un triunfo artístico, certificado siglos después en los libros de Arte e Historia, gracias a la entrada en juego de los pinceles de Rembrandt (1606-1669) y Velázquez (1599-1660), considerados los mejores pintores de todos los tiempos.

Los dos artistas vivieron en la misma época, a 1800 kilómetros de distancia, son admirados por igual en todo el mundo y se interesaron por los mismos temas, pero ninguno llegó a conocer al otro en persona, ni sabían siquiera que existía otro pintor obsesionado con el realismo y la religión, y la forma en la que ésta influía en la vida social.

"Tenemos alguna obra estrictamente católica hecha en Holanda, pero también tenemos obras que son profanas, que no enseñan temas estrictamente católicos o religiosos, pero si se ve que hay modelos católicos detrás de la pintura. De hecho, hay comparaciones que así lo recalcan", añade.

La exposición ha sido proyectada y elaborada por el diseñador francés Jean Michel Wilmotte, con los conocimientos artísticos del jefe de Artes Visuales del Rijksmuseum, Gregor JM Weber, que ha elaborado y presentado la información para cada diálogo entre pinturas y ha subrayado las diferencias y similitudes entre ambos artistas.

Del total de piezas que se exponen, el Prado ha prestado 14 obras maestras, lo que incluye seis pinturas de Velázquez, mientras que el resto de cuadros pertenecen al propio Rijksmuseum o a otras veinte pinacotecas y colecciones privadas de todo el mundo, incluido EEUU, Alemania, Inglaterra y Países Bajos.

La exposición, montada junto al Museo Nacional del Prado en Madrid, es la actividad cumbre del Año de Rembrandt 2019, durante el cual se han preparado y celebrado multitud de eventos y exposiciones de todo tipo para conmemorar el 350 aniversario del fallecimiento del maestro holandés.

Más de 425 000 visitantes han acudido hasta finales de septiembre al Museo del Prado en Madrid para ver una exposición similar a esta, titulada 'Velázquez, Rembrandt, Vermeer. Miradas afines', que mostraba cómo se confrontan los mitos históricos y las realidades artísticas de la pintura holandesa y española de finales del siglo XVI y del XVII e identificar los rasgos que lo unen.