Jóvenes Innovadores: la nueva generación del conocimiento
En los próximos 10 años, los millennial -jóvenes entre 20 y 30 años- representarán el 80% de la fuerza laboral. Esta generación se caracteriza principalmente por ser nativos digitales, es decir que dominan la tecnología como una prolongación de su propio cuerpo.
Esto aunado a otras habilidades como un comportamiento multitasking con capacidad de hacer varias cosas a la vez y utilizan múltiple canales y dispositivos digitales para sus actividades, les hace especialmente críticos exigentes y volátiles.
También son sociales. Es parte de su vida el consultar, compartir y comentar, actividad que realizan principalmente través de sus teléfonos inteligentes.
Llegué aun grupo de jóvenes singulares a través de las redes, siguiendo pistas y vínculos. Presento en este reportaje ejemplos en que con mucha pasión dos grupos de jóvenes diversos impulsan iniciativas emprendedores e innovadoras con la clara intención de provocar un cambio en la sociedad.
Aprender de forma divertida
Johel Batista es un chico que se define como “ultraurbano” de 20 años que estudia ingeniería en la Universidad Tecnológica de Panamá y que es la mente detrás de www.ayudinga.com, una página web que distribuye videos de matemáticas, álgebra y ciencias de manera gratuita.
Para Johel todo surgió cuando tenía 14 años y decidió crear una serie de videos chistosos, relajados y divertidos sobre álgebra, matemáticas y física. Abrió un canal en YouTube y rápidamente tuvo cientos de jóvenes aprendiendo mientras se divertían con sus videos.
¿Por qué el conocimento no puede ser divertido? La peor barrera es sentir que lo que aprendemos no nos sirve para nada porque no lo podemos utilizar en nuestra vida cotidiana. Grabé más de mil videos yo solito en un cuarto en cuatro años, pero enseñando como me hubiera gustado que me enseñaran a mi”, contó.
Esta nueva forma de transmitir conocimiento no solo ha atraído a los jóvenes que necesitan mejorar sus calificaciones en matemáticas, sino que ha despertado el interés de 21 chicos de menos de 25 años, que bajo el liderazgo de Johel y Jackson Rodríguez, forman las legiones científicas de Ayudinga.
En el mes de mayo alcanzaron seis millones de visitas y han acumulado 18 millones de minutos de video, para convertirse en uno de los canales educativos más grande de Centroamérica.
“Somos la escuela más grande de Panamá, pero no tenemos un solo salón de clases”, dice con cierto orgullo.
Diariamente entre 10 a 15 mil personas acceden a su contenido y tienen un promedio mensual de 300 visitas principalmente de jóvenes entre los 13 y 24 años. México es el país de donde más visitas reciben.
Además de innovadores, estos chicos son empredendores. Para financiar su operación, que está bajo una organización sin fines de lucro, llevan a cabo proyectos paralelos como son capacitaciones para profesores en las escuelas y han realizado una alianza con Senacyt para capacitar a profesionales en las Infoplazas de todo el país. Esto tiene como propósito llegar a jóvenes en áreas de difícil acceso.
Siempre pensando en las nuevas tendencias del conocimiento, crearon Ayudinga Media Inc una empresa para vender contenidos especializados a las escuelas, asesoría y administración en clubes de ciencia, y desarrollar un proyecto que utiliza la inteligencia artificial para definir patrones o deficiencias de aprendizaje que ya se encuentra en fase de prueba en un colegio de la ciudad.
Yo sueño con que un pelao que está en la comarca tenga el mismo contenido que uno que está en Costa del Este. Ahí es que vamos, el internet se ha vuelto el nivelador social más grande y si el internet va de la mano de la educación es excelente porque se tiene acceso a la misma información, al mismo conocimiento”, afirma Johel.
El dataismo y las noticias falsas
Este trío dinámico conformado por Gaspar García de Paredes, quien trabaja en una firma de inversión aquí en Panamá, Ana Graciela Méndez, periodista residente en Nueva York y Alfonso Grimaldo, abogado es el grupo creador de Nueva Nación.
Se trata de boletín informativo que se distribuye tres veces por semana a través de correo electrónica a cerca de 10 mil usuarios y nos mantiene al tanto de las noticias más relevantes de Panamá y el mundo.
Alfonso Grimaldo cuenta como hace dos años juntaron todos sus ahorros y empezaron el proyecto: “tomando en cuenta de que los jóvenes panameños de menos de 28 años no buscan las noticias en medios tradicionales como periódicos o canales de televisión y la mayoría consume sus noticias a través de las redes sociales, decidimos hacer un medio nativo digital que naciera en las redes para ofrecer contenido de una forma atractiva para los millennianls panameños”.
A medida que lo fueron desarrollando esta iniciativa empezaron a buscar formas de financiamiento que no limitaran su línea editorial y fue así como concibieron el Tabulario un proyecto que obtuvo un financiamiento del Brown Institute for Media Innovation, el cual fue presentado hace unas semanas en un taller con la participación de periodistas de todos los medios.
Se trata de un repositorio de información estadísticas online para desarrollar periodismo de investigación y datos para apoyar las labores investigativas tendientes a combatir la información falsa que circulas en internet y en las redes.
En la dirección www.data.nuevanacion.com se puede encontrar reunida una gran cantidad de información estadística muy útil no solo para periodistas, sino para académicos o investigadores que quieren profundizar o contrastar datos diversos para mejorar el conocimiento de la realidad nacional.
Además, la base de datos se van alimentando constantemente, de manera que tenga siempre información nueva y actualizada.
El 40% de los Nationites –como bautizó a esta comunidad un suscriptor- tiene entre 18 y 32 años y el 20% de 60 hacia arriba.
Queremos que Nueva Nación sea una comunidad de información, más que un periódico. A través del correo los lectores no solo reciben nuestra información, sino nos mandan sus comentarios, y nos sugieren temas, tenemos esta relación directa con nuestros lectores, queremos ser el núcleo de una comunidad de ciudadanos formados inteligente y activos que puedan hacer una diferencia en las elecciones del 2019”, declaró Alfonso.
Para estos jóvenes la línea editorial es la fortaleza de su propuesta. Buscan enfocarse en lo relevante y no en agendas mediáticas marcadas por tendencias.
“Eso es lo que a la gente le gusta de Nueva Nación, que tenemos una línea editorial independiente, no tenemos miedo de decir si algo nos parece mal o bien”, agrega.
Aunque no recienten los medios tradicionales y respetan la función que cumplen, están convencidos de que Nueva Nación está llenando el vacío de cobertura noticiosa en los jóvenes que con tantas opciones de información en los medios consumen las noticias de maneras muy singulares.
Los millennials están informados por las redes y ven con escepticismo a los medios tradicionales. Nosotros llegamos a ellos contándoles quiénes somos, cómo pensamos...nuestra honestidad y acceso es lo que nos ha permitido llegarles”, afirma.
A través de Nueva Nación y Tabulario, estos jóvenes buscan impactar con suficiente fuerza en sus subscriptores para generar una acción. Tienen claro quienes son sus lectores: personas que además de sus roles cotidianos creen que vivir en democracia significa tener parte del poder y quieren ejercerlo.
Tareas pendientes
¿Son los jóvenes de Ayudinga o de Nueva Nación excepcionales en nuestro país?
Ante esa pregunta, Julio Escobar, Presidente de la Fundación para la Excelencia Educativa, explica que este grupo de jóvenes son excepcionales en cuanto a su capacidad de actuar.
Para él en los últimos 10 años hemos visto un cambio notable en el interés que tenemos en Panamá por emprender con iniciativas dinámicas con altas posibilidades de transformar el país y el mundo.
Considero que la educación es el principal agente para lograr igualdad de oportunidades y que se rompa el círculo de una generación a otra de la marginalidad. No conseguimos comprender que en el siglo XXI necesitamos algo más que una posición geográfica para construir oportunidades a largo plazo y eso se hace con conocimiento, necesitamos gente capaz de resolver problemas, la inversión va más allá de la infraestructura”, señaló categóricamente.
La aspiración de estos jóvenes de impactar en la sociedad, de transformar el mundo es reconfortante. Es indudable que el impacto de las nuevas tecnologías de la información ha puesto al alcance de la mayoría herramientas que permiten a los individuos y colectivos ejecutar proyectos con mayor impacto.
Es por esto que se necesita urgentemente una transformación tanto del sistema educativo como de las iniciativas que generen oportunidad para insertar no solo a estos jóvenes pioneros en la misión de abrir el camino al conocimiento, sino a todos los que por razones estructurales siguen rezagados y marginados de las oportunidades del desarrollo.
Los jóvenes no son nuestro futuro, son el presente.