Argentina defiende ir a la ONU por deuda
El canciller argentino defendió la decisión del gobierno de recurrir a la Organización de Naciones Unidas para que se establezca un marco regulatorio que proteja los procesos de reestructuración de deuda de los ataques especulativos.
"La semana pasada hablé con varios cancilleres europeos. Varios me reconocieron que la Argentina tenía un buen argumento cada vez que yo insistía en que el tema de la deuda es un tema de derechos humanos. Se puede comprobar en la Argentina evaluando los niveles de pobreza, de desempleo y de eliminación de la ayuda social en el 2001" cuando el país entró en cese de pagos, dijo el canciller Héctor Timerman en una nota publicada el domingo en el diario Página 12.
El proyecto para la redacción de la llamada "Convención Multilateral para la Reestructuración de Deudas Soberanas", que cuenta con el respaldo de 130 países, se debatirá en la Asamblea General de la ONU el próximo 9 de septiembre.
El propósito de esta iniciativa es "tener un marco legal y justo que le dé a los países la posibilidad de restructurar sus deudas y que no se vean extorsionados por fondos buitres", dijo Timerman al anunciar el proyecto.
De esta forma, se evitaría el bloqueo de pagos como el que sufrió Argentina con los bonistas de los canjes de 2005 y 2010 que amenaza a futuros canjes de deuda.
"El default no es un problema argentino, más allá de que la Argentina hoy no está en default y que por eso no se pagaron los seguros de default correspondientes", dijo el canciller.
Añadió que "las consecuencias del default son expresión del fracaso producido por la falta de reglas internacionales. No hay mecanismos de salida regulados. Los países que han defaulteado no fueron sólo los más pobres. La Argentina, ocho veces. Los Estados Unidos, seis", recordó.
Según Timerman, las medidas dictadas por el juez federal de Nueva York Thomas Griesa, quien bloqueó el pago de títulos hasta que el país sudamericano no cumpla con el pago al contado y de inmediato de 1.600 millones a fondos de inversión que le ganaron un juicio histórico, "mostraron que es imposible la reestructuración de deuda soberana en condiciones justas sin un acuerdo entre todos los países".
"Hasta nuestro caso, muchos países habían aceptado negociar con los fondos y pagar lo que pedían los buitres. Este gobierno se negó a hacerlo porque las decisiones del juez Griesa son violatorias de la soberanía argentina. Y además son ilegales, porque entorpecen acuerdos de la Argentina con terceras partes que no formaban parte del litigio", remarcó.
El canciller aseguró, además, que los denominados fondos buitre "son la parte más fea del sistema capitalista" y advirtió que el gobierno no busca "un enfrentamiento" político con Estados Unidos.
En caso que la Asamblea de la ONU vote a favor de establecer una convención sobre esta cuestión luego queda a criterio de cada país aceptarla o no.