Benedicto XVI niega que lo forzaran a renunciar
El papa emérito Benedicto XVI desmintió las especulaciones en torno a que fue presionado para renunciar y dijo que tomó esa decisión solo y libremente. Benedicto dio esa explicación en un escrito dirigido a la corresponsal del periódico La Stampa Andrea Tornielli, en medio de una nueva ola de especulación acerca de las razones que lo llevaron a renunciar al acercarse el primer aniversario de su separación, la primera vez que un pontífice deja el cargo en más de 600 años. La Stampa informó el miércoles que Benedicto escribió: "No hay un mínimo de duda acerca de la validez de mi renuncia al ministerio de Pedro. La única condición para su validez es la absoluta libertad de la decisión. Especular acerca de la invalidez es simplemente absurdo". Benedicto, de 86 años, también defendió su decisión de seguir usando los ropajes blancos del papa al sostener que no tiene otra vestimenta disponible. Los medios volvieron a especular sobre las razones que llevaron a Benedicto a renunciar. El periodista italiano Antonio Socci insinuó la semana pasada en el periódico de tendencia conservadora Libero que su dimisión podría ser inválida ya que obedeció a las presiones de un grupo de cardenales opositores a él. Sin embargo, Benedicto dejó en claro desde el comienzo de su papado que éste podría no concluir con su muerte. En el libro "Luz del Mundo", publicado en 2010, escribió: "Si un papa se da cuenta claramente de que no es física, sicológica y espiritualmente capaz de manejar las responsabilidades del cargo tiene el derecho, y bajo algunas circunstancias, también la obligación de renunciar". Benedicto hizo una sorpresiva aparición el pasado fin de semana en la ceremonia de designación de 19 cardenales. Fue la primera ocasión que él y Francisco, el actual papa, aparecieron juntos en una ceremonia litúrgica, lo que de inmediato desató la especulación en torno a la posible reintegración de Benedicto a las actividades de la iglesia.