Diputados rusos rechazan las sanciones de EEUU y advierten de las consecuencias
Diputados rusos criticaron hoy la decisión de Estados Unidos de imponer sanciones a Moscú por el caso del exespía ruso Serguéi Skripal y advirtieron de la posibilidad de aplicar contramedidas ante esa nueva muestra de la "desaforada histeria rusófoba" en EEUU.
"Si los acontecimientos continúan desarrollándose de esa forma, estoy convencido de que daremos una respuesta adecuada", dijo a la prensa Leonid Slutski, jefe del comité de Asuntos Internacionales de la Duma o Cámara de Diputados.
El parlamentario recordó que para ello los legisladores previeron "una serie de medidas legales" que fueron incluidas en la ley sobre la respuesta a las sanciones de EEUU y sus aliados, aprobada el pasado mayo.
"EEUU busca utilizar cualquier pretexto para contener a Rusia y promover sus intereses de una manera agresiva. Su intención de aplicar sanciones por el caso Skripal sin presentar hasta el momento prueba alguna (de la culpabilidad de Rusia), es otro ejemplo de desaforada histeria rusófoba", aseveró Slutski.
Su colega Dmitri Novikov opinó, por su parte, que las nuevas sanciones formarían parte de "las luchas políticas internas" en las que está sumido Estados Unidos.
El parlamentario cree que las elecciones legislativas del próximo noviembre alientan a los políticos estadounidenses a reafirmar su compromiso con el curso adoptado en relación con Rusia y "de ahí que hayan surgido las sanciones".
El diputado Vladímir Gutenev, a su vez, restó importancia al anuncio de EEUU al asegurar que "aunque no se trata de una noticia buena, tampoco es alarmante" puesto que las sanciones impulsarán las esfuerzos para la sustitución de las importaciones y contribuirán a la diversificación de la economía.
El Departamento de Estado de EEUU informó ayer de la imposición a partir del 22 de agosto de nuevas sanciones contra Rusia, en respuesta al envenenamiento con el agente nervioso Novichok del exespía Skripal y su hija en territorio del Reino Unido.
Las sanciones fueron anunciadas en base a una norma de 1991, conocida como Ley de Eliminación y Control de Armas Químicas y Biológicas.
De acuerdo a esa norma, Rusia dispondrá ahora de un plazo de 90 días para evitar sanciones más severas, para lo que tendrá que admitir una inspección de un organismo internacional como la ONU y garantizar que no volverá a emplear ese tipo de armamento.