Informe MH370: Batería de localizador submarino había expirado
El primer informe completo sobre el vuelo 370 de Malaysia Airlines publicado el domingo reveló que la batería de una radiobaliza de localización submarina de una de las cajas negras había expirado más de un año antes de la misteriosa desaparición del avión el 8 de marzo de 2014.
La publicación del informe coincide con declaraciones del primer ministro de Australia, Tony Abbott, quien dijo que la búsqueda avión no terminará aunque el rastreo de la zona bajo observación en la costa oeste del país no arroje resultados.
Más allá de esa anomalía, el detallado informe dedica páginas y páginas a describir la completa normalidad con que ocurrió el vuelo, arrojando poca luz sobre el mayor misterio de la aviación mundial.
Familias de las 239 personas que viajaban en el avión recordaron el primer aniversario de la desaparición del Boeing 777, prometiendo no renunciar nunca a la búsqueda de los restos ni a obtener respuestas sobre lo sucedido a sus seres queridos.
A pesar de una exhaustiva búsqueda del avión, no se han encontrado pistas sobre su paradero. A finales de enero, el gobierno de Malasia declaró formalmente la desaparición del vuelo 370 como un accidente y los pasajeros fueron dadas por muertos.
La importancia de la batería caducada de la radiobaliza de la grabadora de datos del vuelo no fue evidente de inmediato, excepto por indicar que los investigadores habrían tenido menos posibilidades de localizar la aeronave en el océano Índico, donde se cree que se estrelló, incluso aunque hubiesen estado cerca. Sin embargo, el informe dice que la batería del localizador del dispositivo que registra las voces en cabina si funcionaba.
"El único objetivo de la investigación es la prevención de futuros accidentes o incidentes, y no tiene el propósito de determinar culpas o responsabilidades", dijo el informe.
A pesar de que la batería del localizador se había agotado, el instrumento en sí funcionaba correctamente y, en teoría, capturó toda la información del vuelo.
Los dos instrumentos son clave en cualquier accidente porque graban las conversaciones de cabina y datos de vuelo, hasta el final del vuelo.
El informe de 584 páginas realizado por un grupo de investigadores independiente entró en detalles minuciosos sobre la vida de la tripulación - sus registros médicos y financieros y su formación antes de detallar el historial de servicio del jet - además del programa de mantenimiento, el clima, los sistemas de comunicación y otros aspectos que no mostraron nada anormal excepto por el detalle no revelado previamente de la fecha de caducidad de la batería.
El documento apunta que, según los registros de mantenimiento, la batería de la radiobaliza pegada a la grabadora de datos de vuelo expiró en diciembre de 2012. "Hay algún margen extra en el diseño de la duración de la batería para asegurar que cumplirá los requisitos mínimos".
"Sin embargo, una vez pasada la fecha de expiración, la efectividad (de la batería) disminuye y podría operar durante un tiempo reducido hasta que finalmente se descarga", dijo el reporte. Aunque es posible que la batería siga funcionando pasado ese límite, "esto no garantiza que funcione o que cumpla el requisito obligatorio mínimo de 30 días".
El informe ofreció una idea del estado físico y mental del capital del vuelo, Zaharie Ahmad Shah, diciendo que no tenía un historial conocido de apatía, ansiedad o irritabilidad. "No hay cambios significativos en su estilo de vida, conflictos interpersonales o tensiones familiares", señala.
El documento añadió que "no (hay) señales aislamiento social, cambios en sus hábitos o intereses, auto abandono, o abuso de alcohol o drogas" por parte de Zaharie, su primer oficial y el personal de cabina.
Las comprobaciones financieras tampoco mostraron nada anormal sobre sus ingresos brutos mensuales y su patrón de gastos. El informe apunta que Zaharie tenía varias cuentas bancarias y dos fondos fiduciarios nacionales. El piloto tenía dos casas y 3 vehículos, pero no había registros de un seguro de vida.
El copiloto, el primer oficial Fariq Abdul Hamid, era titular de dos cuentas de ahorro y de una en un fondo fiduciario nacional. Era propietario de dos autos y "gastaba dinero en el mantenimiento". "No tiene muchos ahorros en sus cuentas bancarias. Tiene un seguro de vida", añade.
La investigación apunta además que los 221 kilos de baterías de iones de litio embaladas por Motorola Solutions en el estado malasio de Penang, en el norte de país, que iban en el avión no pasaron el control de seguridad en el aeropuerto Penang. El cargamento fue inspeccionado físicamente por personal de carga de la aerolínea y pasó la inspección aduanera y obtuvo su autorización antes de ser sellado y salir de Penang un día antes del vuelo. En el aeródromo de Kuala Lumpur, fue colocado dentro del jet sin pasar ningún control de seguridad adicional.
El informe apunta que las baterías no están reguladas como productos peligrosos. Otros 99 cargamentos de baterías de iones de litio viajaron en vuelos de Malaysia Airlines a Beijing entre enero y mayo del año pasado, señaló.
En Sydney, el primer ministro australiano Abbott dijo el domingo que la búsqueda de la aeronave continuará aunque los investigadores que rastrean una zona de 60.000 kilómetros cuadrados (23.166 millas cuadradas) de zona de lecho oceánico al oeste del país no den con él.
Antes de las declaraciones de Abbott, no estaba claro qué ocurriría si la búsqueda en la zona, que está previsto que termine en mayo, no arrojaba pistas.
"No puede continuar por siempre, pero mientras haya indicios razonables, la búsqueda continuará", dijo Abbott, cuyo país lidera la operación de rescate, a periodistas. "Tenemos 60.000 kilómetros cuadrados que son objeto de esta búsqueda. Si no tiene éxito, hay otros 60.000 kilómetros cuadrados que tenemos intención de rastrear y, como he dicho, estamos razonablemente seguros de encontrar el avión".
Mientras, familiares de los pasajeros y la tripulación que iban a bordo del avión recordaron el primer aniversario de la desaparición del jet. Voice 370, un grupo de apoyo a los parientes, celebró un "Día de la Memoria" en un centro comercial de Kuala Lumpur con canciones, poemas y oraciones.
"Es importante recordar al público que seguimos sin tener ninguna respuesta y que seguiremos la búsqueda", dijo Grace Subathirai Nathan, cuya madre, Anne Daisy, iba a bordo del avión.
"La falta de respuestas y pruebas definitivas - como restos de la aeronave- ha hecho que esto sea más difícil de afrontar", dijo el primer ministro de Malasia, Najib Razak, en un comunicado. "Junto con nuestros socios internacionales, hemos seguido las pocas pruebas que existen. Malasia sigue comprometida con la búsqueda, y espera que el MH370 sea encontrado".
El ministro de Exteriores de China, Wang Yi, de donde procedían la mayoría de los pasajeros, dijo que su gobierno proporcionará "todos los servicios necesarios a cada familiar" y les ayudará a defender sus "derechos e intereses legítimos y legales".
"Ha pasado un año, el avión no ha sido localizado, pero la operación de búsqueda continuará", apuntó en una conferencia de prensa en Beijing. "Hoy debe ser un día difícil para los familiares cercanos (...) Nuestros corazones están con ustedes".