Los palestinos recurren a la ONU para poner fin a la ocupación israelí

Ante la parálisis de las conversaciones de paz, el aumento de la presión de los habitantes y el creciente apoyo internacional, los palestinos creen que pueden obtener una resolución de la ONU que ponga fin a la ocupación israelí.

Jordania espera presentar un borrador de resolución con respaldo árabe ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas este miércoles, con el objetivo de lograr la aprobación de un programa de dos años para que Israel retire a sus fuerzas de Cisjordania ocupada y de Jerusalén Este.

No cabe duda de que Estados Unidos vetará toda resolución que imponga una fecha tope para una retirada israelí y el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, se está entrevistando con aliados europeos y altos responsables israelíes y palestinos esta semana para tratar de evitar una crisis política.

Sin embargo, después de que la última ronda de conversaciones de paz respaldada por Estados Unidos fracasara en abril y, ante el incremento de la violencia en Cisjordania y Jerusalén Este, los expertos afirman que los palestinos están convencidos de que una resolución de la ONU es el único camino.

Una resolución es "la única opción que le queda al liderazgo palestino", afirmó el analista político Abdel Majid Sweilem. "Todas las conversaciones futuras deberán realizarse sobre una nueva base, con un programa acordado internacionalmente", dijo, agregando que sólo la presión de una fecha tope obligará a Israel a hacer concesiones a la solución de dos Estados.

Varias rondas de conversaciones de paz no lograron resolver las cuestiones clave del conflicto: la creación de un Estado palestino con fronteras definidas, el destino de los refugiados palestinos y el estatuto de Jerusalén.

La frustración de los palestinos ha aumentado, fomentada por la permanente expansión de las colonias judías en las tierras palestinas y los llamamientos de los grupos de derecha a aumentar los derechos judíos en un lugar sagrado de Jerusalén.

Esa cólera estalló en la guerra de la Franja de Gaza el verano (boreal) pasado, en varios "ataques solitarios" en Jerusalén y Cisjordania y en frecuentes enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad israelíes y palestinos que lanzaban piedras.

LA AUTORIDAD PALESTINA CAREDE DE AUTORIDAD

Los líderes palestinos, presionados para actuar, siguen el único camino que podían, afirmó George Jiacaman, de la Universidad Birzeit de Cisjordania. "Los líderes palestinos se vieron obligados a acudir al Consejo de Seguridad como una alternativa a las medidas que exigía la calle palestina, como cesar la coordinación de seguridad con Israel", dijo.

Los palestinos acordaron una cooperación en materia de seguridad con Israel en conformidad con los acuerdos de paz de Oslo firmados en 1993, que también crearon la Autoridad Palestina, para administrar los territorios ocupados hasta que se llegase a un acuerdo en un plazo de cinco años.

Dos décadas más tarde, sin un acuerdo a largo plazo a la vista, los responsables de la Autoridad Palestina están convencidos de que su poder ha disminuido.

Se trata de "una Autoridad Palestina sin autoridad alguna", dijo recientemente el jefe de los negociadores palestinos, Saeb Erakat, a unos periodistas extranjeros en Belén. "A ellos les gusta llamarnos autoridad, pero la realidad en la zona (es que) desde 2009 nos hemos visto totalmente privados de toda jurisdicción en todos los sectores", afirmó.

Jiacaman comparó el poder de la Autoridad Palestina con el de una alcaldía. "La legitimidad de la Autoridad Palestina está amenazada porque la calle palestina creyó que su instauracion conduciría a la creación de un Estado, pero en lugar de eso, se trata simplemente de una administración regional glorificada".

La frustración de los palestinos también se sintió en la comunidad internacional, en particular en Europa, donde los legisladores españoles, británicos y franceses votaron recientemente a favor de reconocer a Palestina como un Estado.

"Estamos recibiendo mucha ayuda", explicó Erakat, refiriéndose a los votos europeos, sugiriendo que Estados Unidos también podría estar más abierto a una especie de resolución en la ONU, dada su implicación en otras zonas de la región. "Estamos tratando de internacionalizar nuestra causa", agregó.