Cuatro personas asesinadas por presuntos disidentes de FARC en Colombia
Cuatro personas fueron asesinadas este viernes por presuntos disidentes de la exguerrilla FARC mientras realizaban una aparente compra de droga en una zona rural del suroeste de Colombia, informó la policía.
Los tres hombres y la mujer que aparecieron muertos cerca del municipio de Jamundí, Valle del Cauca, habrían sido ejecutados en horas de la mañana con "armas de corto alcance, con tiros de gracia en la cabeza", por presuntos disidentes de la disuelta guerrilla marxista, dijo a medios el general Hugo Casas, comandante de la Policía Metropolitana de Cali.
La primera hipótesis de las autoridades apunta a que los fallecidos "estaban realizando alguna comercialización" de drogas con miembros de la estructura Jaime Martínez, disidentes que no se acogieron al pacto de paz firmado en 2016 con las FARC, y que estos "los habrían podido asesinar", señaló.
Uno de los muertos trabajaba en un transporte informal y viajaba regularmente desde Jamundí, cerca de la ciudad de Cali, capital departamental, hacia veredas alejadas.
El Valle del Cauca es una zona con altos índices de violencia, donde bandas de narcotráfico y microtraficantes, así como guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) se disputan las rentas ilegales.
Entre enero y agosto de 2019, han sido registrados 1.400 homicidios en ese departamento. A nivel nacional, solamente el departamento de Antioquia (1.407) tiene más muertes violentas en el mismo lapso, según el estatal Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses.
Las disidencias de las FARC operan sin mando unificado, con cerca de 2.300 combatientes, entre exguerrilleros y nuevos reclutas, dedicados principalmente al narcotráfico y la minería ilegal, según inteligencia militar.
Tras cuatro décadas de lucha contra el narcotráfico, Colombia sigue siendo el principal productor de cocaína del mundo y Estados Unidos el mayor consumidor de esta droga.
El país sudamericano produce cerca de 70% de la cocaína que circula en el mundo. En 2017 alcanzó un récord mundial de 171.000 ha en área dedicada al cultivo de coca, según la ONU.