"Vamos a asistir al gran retorno de Estados Unidos" en América Latina
El acercamiento entre Cuba y Estados Unidos, confirmado con la liberación de 53 presos políticos por La Habana, marca el "gran retorno" de Washington a América Latina tras años de distanciamiento, explicó a la AFP, Olivier Dabène, presidente del Observatorio político de América Latina y el Caribe (Opalc), que publicó este lunes su informe de 2014.
El impacto del anuncio, realizado el 17 de diciembre por los presidentes de Estados Unidos y Cuba, Barack Obama y Raúl Castro, respectivamente, será importante, porque incluso si Barack Obama no puede él solo levantar el embargo, puede hacer que este embargo se convierta en una especie de cascarón vacío, opina él presidente del Obsevatorio político de América Latina y el Caribe.
Por ejemplo, subrayó Dabène, el hecho de retirar a Cuba de la lista de países que respaldan el terrorismo, es extremadamente importante porque eso abre plenas posibilidades nuevas para que Cuba sea candidata a los préstamos del Banco Mundial.
El experto consider que la mejor forma de liquidar la revolución cubana es abrir las transferencias monetarias y las posibilidades de viaje.
Del mismo modo, se ha ampliado las categorías de la población que puede viajar y aumentó el monto de las transferencias monetarias (desde el extranjero, ndlr): habrá una afluencia considerable de dólares y eso va a ser muy rápido. ¿Cómo liquidar la revolución cubana? Abrir las transferencias monetarias y las posibilidades de viaje, es la mejor forma de hacerlo, sin duda.
Dabène analizó que el retorno de Obama en las relaciones interamericanas podría significar el relanzamiento de un proyecto comecial, la zona libre de Comercio de las Américas, que había sido abandonado hace una década.
"Vamos a asistir al retorno triunfal de Estados Unidos y Obama en abril en Panamá, en la Cumbre de las Américas, y con eso, a una reconstrucción de las relaciones interamericanas", apuntó el experto.
Según, Dabène, eso hará aún más fácil para Obama reafirmar su liderazgo en la región, que no tiene un gran líder.
"Es una debilidad en comparación con los años 2008-2010, los grandes años de la dupla entre (el venezolano Hugo) Chávez y (el brasileño Luiz Inacio) Lula (da Silva), que tenía la capacidad de imponer la mediación en determinados conflictos", puntualizó.