Medidas de bioseguridad: las que realmente funcionan

Medidas de bioseguridad han cambiado en un año de pandemia / Yenny Caballero
Yenny Caballero - Periodista
10 de marzo 2021 - 20:50

Ciudad de Panamá/Tras un año en pandemia las medidas de bioseguridad para evitar la transmisión de la Covid-19 han cambiado. Ahora, a nivel mundial, se evalúa cuáles son las que realmente funcionan.

El Centro para el Control y Prevención de Enfermedades en Estados Unidos advierte que no se cree que la propagación a través del contacto con superficies contaminadas sea una forma común de propagación de la Covid-19, que es un tema que siempre ha sido debatible y controversial.

También se analiza la efectividad del uso de pediluvios, toma de temperatura y las desinfecciones.

El infectólogo Javier Nieto explica que todo lo que tenía que ver con el uso de pediluvios o esterilización de dispositivos móviles, todas estas medidas desde un punto de vista higiénico agregan valor, pero desde un punto de vista de la transmisión de la Covid, sólo dan una falsa sensación de seguridad porque no hay evidencia que actúen en la transmisión.

Explican, también, desde el CDC que la principal forma de transmisión se da cuando las personas con covid-19 tosen, estornudan, cantan, hablan o respiran, lo que produce gotículas respiratorias. Que la infección se da cuando son inhaladas o caen en la nariz o la boca de la otra persona.

Inicialmente se usaron pediluvios, dejar los zapatos afuera de la casa, limpiar los artículos que comparábamos en el supermercado, a limpiar lo que se entregaba por delivery e incluso usar termómetros como especie de filtro para evitar entrada a las personas con temperatura altas, explica el infectólogo Xavier Sáez Llorens, que esas actividades se han ido abandonando con el tiempo porque ofrecen muy poca utilidad.

Ahora sabemos que lo que funciona es lavarse frecuentemente las manos, usar mascarilla, pantalla facial y mantener el distanciamiento físico y ahora colocarse la vacuna anticovid.

La temperatura normal de una persona está entre 36.5 a 37. 5, explica el epidemiólogo Arturo Rebollón, que ha visto que si la temperatura no se toma en el sitio correcto hay errores de medición. Por ejemplo, las mediciones en la mano que registran una temperatura muy por debajo

Y advierte que por eso se están eliminando todas estas medidas que crean falsa sensación de seguridad y ya no están recomendadas en ninguna guía internacional ni protocolos de bioseguridad.

Ahora también se sabe que el virus no produce mucha fiebre, de hecho solo se da en el 10% de los casos, por ello la toma de temperatura podría no funcionar para frenar la transmisión de la covid.

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