Una abuela de 107 años mantiene sus fuerzas intactas y dedicada a su familia en Veraguas

Día de la Madre

Haciendo una tortilla en su hogar
Haciendo una tortilla en su hogar / Cortesía Mides

Con 107 años, Felipa Rodríguez muele maíz, prepara sancochos, asa tortillas, asiste a misa y realiza caminatas de hasta una hora.

Mantiene intactas sus fuerzas, esas que le ayudaron a criar a sus 10 hijos en las montañas de la provincia de Veraguas.

Nació el 7 de febrero de 1914 cuando la República de Panamá apenas tenía su sexto presidente (Belisario Porras). Creció entre matas de café, entre árboles de naranjas, entre ríos y montaña, disfrutando el placer que sólo brinda el campo.

Esta beneficiaria del Programa 120 a los 65, trabajó desde siempre en la huerta de sus padres, pilando arroz, pero gran parte de su vida la ha dedicado a su familia. A educar a sus hijos, el mejor trabajo que pudo tener y del cual se siente orgullosa. Por eso nunca pudo cotizar un seguro social, porque en sus años mozos en el corregimiento de El Cuay en el distrito de Santa Fe no había empresa o fábricas que otorgaran plazas de empleos.

Para esa época los sistemas de protección social a favor de los trabajadores apenas se estaban gestando. Por esa razón, la transferencia que recibe trimestralmente representa la jubilación que nunca tuvo, pero que siempre mereció.

Mantiene sus fuerzas para seguir haciendo actividades domésticas
Mantiene sus fuerzas para seguir haciendo actividades domésticas / Cortesía Mides

Rosa Urriola, su hija, la describe como una madre ejemplar que hizo todo por el bienestar de su familia. “A pesar que vivimos con limitaciones recuerdo que éramos profundamente felices, porque reinaba un ambiente de alegría y buen humor”, reflexiona Rosa.

Asegura que su madre siempre actuó con amor, con paciencia con esas virtudes que distingue a las madres y que las hace un ser especial.

Felipa es la matriarca de su familia compuesta por 16 nietos, 11 bisnietos y un tataranieto. Nunca asistió a la escuela, pero educó a sus hijos con valores. Le inculcó desde pequeño tres cosas que para ella forman a una persona: trabajo, respeto y honestidad.

Lleva más de 72 años casada con Cirilo Urriola de 93 años, su eterno compañero con el que ha compartido el mejor regalo que le ha dado la vida: sus hijos.

¿Cuál es el secreto para vivir tanto?

Confiesa que la respuesta está en dormir mucho, asistir a misa, comer bajo en grasa, alejarse de las bebidas azucaradas y tomar una taza de café a las 4:00 de la madrugada. Secretos que seguramente le sirvan para volver a soplar las velas el próximo 5 de febrero cuando llegue a 108 años.

Es devota de San Andrés y a él le confiere su buen estado de salud. Por eso todos los domingos asiste a la capilla para pedirle por la salud de los suyos y para que le siga extendiendo los años y poder seguir con el placer de levantarse con el sonido de los gallos y dormirse a la sombra de la brisa del campo.

La ministra de Desarrollo Social, María Inés Castillo, explicó que un total de 574 panameños (as) mayores de 100 años están cubiertos por 120 a los 65. Se trata de ciudadanos con derechos a controles médicos y programas sociales dirigidos a proteger sus derechos.

Reconoció que Doña Felipa representa a la mujer rural que con su trabajo y dedicación ha contribuido al desarrollo de una sociedad forjada en valores y principios.

Junto a su compañero de vida y familiares
Junto a su compañero de vida y familiares / Cortesía Mides
Si te lo perdiste
Lo último
stats