Trabajadoras sexuales piden ley al celebrar su día

Las trabajadoras sexuales reclaman una ley que las legalice para evitar la discriminación y maltrato a que son sometidas por las autoridades.

El llamado lo reiteró este lunes 2 de junio de 2014, con ocasión del Día de las Trabajadoras Sexuales, la dirigente Dulce Ana, quien representa al movimiento panameño en la federación internacional y planea promover un anteproyecto de ley ante la nueva Asamblea Nacional de Diputados que se instalará el 1 de julio.

Dulce Ana dijo que debido a la persecución a que son sometidas las trabajadoras sexuales, las autoridades las están orillando a la clandestinidad.

También denunció que desde hace tres semanas las autoridades de Salud cerraron la clínica amigable en el corregimiento de Santa Ana, donde estas mujeres recibían atención médica; y solo queda abierta la de Veranillo.

Según Dulce María, en Panamá hay más de cinco mil trabajadoras sexuales, incluyendo las alternadoras.

LO QUE DICEN LOS CIUDADANOS

Un sondeo realizado por TVN, dejó en evidencia que hay solidaridad hacia las mujeres que han optado por dar placer a otros.

“Hay que respetarlas”, sugirió un hombre, ya que él considera que la prostitución es como un trabajo cualquiera y en todas partes del mundo existe.

Otro coincidió en que las trabajadoras sexuales deben ser tratadas con respeto, pero urgió a darles apoyo “para ver si se reduce ese flagelo social y dejan ese trabajo que se dice es el más antiguo que existe.”

De igual forma se pronunció otro ciudadano, quien considera que a estas mujeres se les debe dar alternativa"para que dejen ese trabajo denigrante".

Otro ciudadano no aprueba el trato que la policía dispensa a estas mujeres, ya que según contó, le tocó ver cómo las patrullas las corretean y se las llevan detenidas, aunque él reconoce que algunas se dedican a delinquir.

También a nivel de las mujeres hay solidaridad para con las trabajadoras sexuales.

Una ciudadana afirmó que estas mujeres se merecen respeto y una joven coincidió en que las trabajadoras sociales deben ser respetadas como seres humanos porque algún motivo tendrían para dedicarse a la prostitución.